ROMA.- La francesa Mary Pierce y la rusa Anna Kournikova, las dos únicas "estrellas" de la primera jornada del torneo femenino de Roma, debutaron hoy con sendas victorias, pasando más apuros la primera que la segunda.
Una jornada "huérfana" de las grandes atracciones (las ocho primeras cabezas de serie acceden directamente a segunda ronda) que ha tenido consigo como principal, y casi única, sorpresa la derrota de la estadounidense Meghann Shaughnessy ante una sueca Asa Svensson procedente de la previa, por un doble 6-3.
Pierce y Kournikova, el pasado y el presente en cuanto a las pasiones del aficionado masculino del romano Foro Itálico, se impusieron a la suiza Marie-Gaianeh Mikaelian, por 6-3, 5-7 y 6-4, y a la española Marta Marrero, por un doble 6-3, respectivamente.
Unos resultados que representan en justa medida la oposición que sobre la pista tuvieron Pierce y Marrero, jugadores procedentes de la fase de clasificación.
Y es que Pierce, muy lejos tanto del apelativo de "El Cuerpo" con el que fue denominada hace años como del tenis que la permitió ganar el Abierto de Italia en 1997 y ser finalista en 1999, precisó ante la suiza Mikaelian dos horas y nueve minutos para derrotarla.
La francesa, eso sí, hizo valer su mayor experiencia en los momentos claves, en contadas ocasiones sus mejor calidad tenística y su mejor saber estar sobre la pista central, con un público escaso pero volcado a su favor.
Así, a Pierce la bastó una rotura del servicio de su rival en el octavo juego (5-3) para decantar el primer set ya a su favor. El segundo, en cambio, lo entregó pronto al ceder su saque en el tercer juego y no poder romper el de Mikaelian.
En el set determinante, a Pierce se le pusieron las cosas muy pronto a su favor, pues se fue a un contundente 5-2. Con su saque, luego, tuvo una bola de partido, pero no sólo no la aprovechó sino que cedió el juego y, además, vio a Mikaelian acercarse a un peligroso 5-4.
Pero, a Pierce le volvió a funcionar su saque y acabó el partido a su favor, por 6-4.
Kournikova, que evidenció estar más metida en el torneo que en anteriores presencias, sufrió algo menos ante Marta Marrero, número 75 de la WTA, precisando de ochenta minutos de juego. Y eso que la española empezó el partido de forma esperanzadora, pues se situó con 2-0 a su favor, al romper el saque de la rusa.
Pero luego hubo una racha de roturas de saque en la que la canaria fue la más perjudicada, y del 2-0 pasó al 3-6; es decir sólo se hizo con un juego, y sobre servicio de su rival, mientras que Kournikova se llevó seis.
En el segundo set, Marrero también volvió a ponerse por delante, rompiendo en el tercer juego el saque de Kournikova (2-1). Pero duró poco la ilusión para la canaria, ya que la rusa subió su nivel de juego, dio profundidad a sus golpes, y encaminó cuatro juegos consecutivos (5-2).
Tras hacerse Marrero con su saque, Kournikova cerró el partido con su saque en la primer bola favorable que tuvo para ello. El problema, y grande, para la rusa es que en segunda ronda le espera ni más ni menos que la estadounidense Venus Williams, la número uno del mundo.
