AWAJI, Japón.- Toda Inglaterra se siente ahora feliz de que el capitán de la selección, David Beckham, se haya recuperado por completo de la fractura del pie izquierdo y que esté en disposición de jugar el primer partido del Mundial de Corea/Japón el domingo contra Suecia.
"Siempre creí que podría volver para el partido contra Suecia y confío en que todo saldrá bien. En un campeonato del mundo has de estar seguro de poder aguantar los 90 minutos", dijo hoy Beckhanm en una conferencia de prensa en la isla de Awaji.
La participación de Beckham en la Copa del Mundo parecía incierta luego de fracturarse el pie durante el partido de cuartos de final de la Liga de Campeones contra el Depotivo La Coruña a comienzos de abril.
Toda Inglaterra rezó por la recuperación de Beckham y el jugador ganó la carrera contra el tiempo reanudando esta semana los entrenamientos a fondo.
Beckham señaló que había entrenado bien y que creía que su pie iba a aguantar. "Entré en choques hombre a hombre pensando que todo iría bien y así fue. Todo parece estar en orden".
Los partidos de la ronda previa en el grupo H contra Suecia, Argentina y Nigeria no le inspiran miedo a Beckham. El centrocampista del Manchester United saldrá a jugar con mucha confianza en Saitama: "Uno ha de creer en sí mismo. Nadie te regala nada, pero creemos que podemos batir a Suecia y luego seguir adelante con nuevos triunfos", opinó.
La mayor prueba de fuego será el duelo de ronda previa contra Argentina el 7 de junio. En 1998, Argentina batió a Inglaterra por penales en octavos de final, partido en el cual Beckham fue expulsado tras dar una patada a Diego Simeone.
Pero Beckham rechazó todo tipo de especulación sobre una eventual revancha del argentino: "Ya he jugado un par de veces contra Simeone y nunca hubo problemas, y no creo que los haya aquí tampoco".
