MONTEVIDEO.- Atlético Nacional de Colombia perdió esta noche por 2-1 con Nacional de Uruguay, pero igual se clasificó a la final de la Copa Sudamericana de fútbol, en la definición por penales, con cinco convertidos, contra tres de su rival.
Los goles fueron anotados por el camerunés Pierre Webo a los 18 minutos, empató de penal Neider Morantes, para Atlético Nacional, a los 80’ y aumentó Gustavo Méndez, a los 87 minutos.
En los primeros dos minutos de juego Nacional de Uruguay ya había creado dos situaciones de gol, pero fue apenas un impulso, que se agotó allí mismo, ya que en la primera mitad solamente crearon seis jugadas ofensivas.
Una de ellas fue gol, a los 18 minutos, pero no significaba que los locales dominaran y pudieran seguir de largo. Entusiasmo, aliento, pelotazos y ese gol, fue lo único que mostró el "tricolor" local, que tenía la imperiosa necesidad de ganar por dos goles para evitar los penales.
Contrariamente a lo que tiene acostumbrados a sus seguidores, Nacional uruguayo se dedicó a lanzar pelotas aéreas para que el corpulento Richard Morales descargara el juego hacia sus compañeros o intentara de cabeza. Pero al final, se vio que eso no resultaba.
Los colombianos se pararon con cuatro en el fondo, cinco delante de esa línea y uno adelante, pero sin refugiarse en un esquema ultradefensivo, sino buscando, y encontrando las formas de llegar al arco rival. A veces, lo hizo hasta con cinco hombres, aprovechando fallas defensivas del local.
Atlético Nacional fue un justo ganador, porque se defendió bien, controló la pelota, logró poner nervioso al local y en la definición por penales fue letal. Anotaron Morantes, Ramírez, Mosquera, el arquero Velázquez y Grisales. Para el equipo uruguayo convirtieron Camejo, Peralta y Oscar Morales, pero erró Richard Morales.
En el partido de ida Atlético Nacional había ganado por 2-1, jugando como local, en el estadio "Atanasio Girardot" de la ciudad de Medellín.
El partido de esta noche se jugó en el estadio "Centenario" de Montevideo, ante unas 50.000 personas, y con el arbitraje del brasileño Antonio Pereira, asistido por sus compatriotas Wilson Souza y Jorge Oliveira.
