LOS ANGELES.- La pareja formada por la española Virginia Ruano Pascual y la argentina Paola Suárez son las nuevas campeonas de dobles del Masters femenino al ganar en la final 6-4, 3-6 y 6-3 a la belga Kim Clijsters y a la japonesa Ai Sugiyama, primeras cabezas de serie.
Las campeonas del Abierto de Estados Unidos, que salieron como segundas preclasificadas, volvieron a dar una lección de excelente coordinación en los cruces sobre la red, golpes desde el fondo de la pista y una gran efectividad en el saque durante todo el partido, que se disputó en el Staples Center de Los Angeles.
Los 42 puntos que consiguieron con el primer saque por 34 para Clijsters y Sugiyama fueron la clave del triunfo final que las dejó como las maestras de dobles, un cheque de 250.000 dólares y 485 puntos para la clasificación mundial.
"Todavía no podemos creernos que hayamos terminado un año de esta forma, ganando el Masters, realmente es algo increíble", declaró a EFE Súarez. "Creo que es el premio a todo el trabajo y esfuerzo que hemos puesto durante muchos años".
Por su parte, Ruano Pascual, de 30 años, dijo que era la mejor manera de terminar un año que ya había sido muy especial, pero que ahora tenía doble valor.
"Hemos conseguido los dos últimos torneos más importantes de la temporada como son el Abierto de Estados Unidos y el Masters, pienso que no podemos pedir más", señaló Ruano Pascual.
Tanto Suárez como Ruano Pascual reconocieron que la clave del partido estuvo en su saque, pero también en la manera como restaron y le jugaron a Clijsters, que al final sintió algo el cansancio de haber jugado con anterioridad la final individual que ganó por 6-2 y 6-0 a la francesa Amelie Mauresmo.
"Ahora nos merecemos unas vacaciones para descansar y recuperar fuerzas de cara a la próxima temporada que esperamos nos sea tan positiva como la del 2003", destacó Suárez, de 27 años.
Por su parte, Clijsters reconoció que Ruano Pascual y Suárez jugaron un gran tenis en los momentos decisivos para ganar puntos importantes y se merecieron el triunfo.
"Me hubiese gustado ganar por Sugiyama porque hizo un gran torneo, pero hay que reconocer que nuestras rivales supieron como conseguir el triunfo", agregó Clijsters.