MADRID.- El Real Madrid derrotó hoy al Mónaco francés por 4-2 en un partido, de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, en el que los blancos jugaron una segunda parte llena de casta para tomar ventaja después de sufrir muchísimo.
El partido tuvo más ocasiones que buen juego. Ambos equipos mostraron en toda su extensión el actual momento que pasan: están en crisis y las debilidades defensivas lastran su juego. Pero el Real Madrid celebró la vuelta de Ronaldo, su jugador más decisivo, quien tuvo una gran influencia en la victoria blanca y marcó un gol.
Ante un estadio Santiago Bernabéu poco enchufado al partido, con una hinchada muy decepcionada con los últimos resultados del Real Madrid, el equipo blanco comenzó el encuentro manejando el balón ante un Mónaco que mostró mucho respeto en el inicio.
Pero el equipo francés advirtió pronto que la versión de este Real Madrid es muy menor y tuvo la primera gran ocasión a los 19 minutos, cuando el delantero Ludovic Giuly, toda una pesadilla para los blancos, superó al portero Iker Casillas y el lateral Michel Salgado sacó el balón sobre la línea de gol.
Los reproches de la hinchada despertaron al Real Madrid y Ronaldo, de nuevo titular en el equipo, erró lo impensable, al mandar fuera un centro de Zinedine Zidane cuando se encontraba solo a dos metros de la portería. Y un minuto después, Zidane estrelló en el palo un lanzamiento lejano.
En el minuto 42 llegó el gran golpe del Mónaco. Tras un saque de esquina y varios rebotes mal defendidos por toda la defensa "merengue", el balón cayó llovido en las botas del central Sébastién Schillaci, quien aceptó el regalo y puso por delante al equipo francés. La hinchada madridista explotó de ira y despidió a su equipo con una pitada estruendosa cuando llegó el descanso.
El castigo de la afición hirió el corazón de los blancos, que salieron lanzados en la segunda parte. No tardaron en igualar, gracias a un saque de esquina mal defendido por la defensa gala que aprovechó el central Iván Helguera con fortuna.
En pleno vendaval madridista, aunque con más corazón que cabeza, llegó su segundo gol gracias a un disparo del extremo Luis Figo, uno de los mejores, rechazado por el portero Flavio Roma, y que Zidane aprovechó para marcar en el minuto 70.
El tercer tanto blanco llegó cinco minutos más tarde, tras un discutido penal sobre Ronaldo. Figo tiró, paró Roma, y el rechazo cayó de nuevo sobre el portugués, que esta vez no perdonó.
El Real Madrid siguió empeñado en resolver la eliminatoria y Ronaldo fue de nuevo protagonista, cuando recibió un buen balón de Zidane, que mandó a la red con un disparo cruzado típico del brasileño.
La eliminatoria parecía sentenciada, pero la fiesta de goles no había terminado. Y fue el español Fernando Morientes quien, en su regreso al Santiago Bernabéu, metió de nuevo en la serie al Mónaco con un gran remate de cabeza que se alojó en la red.
Así terminó un partido que fue más vibrante y entretenido que bueno. El Real Madrid salvó un trance delicadísimo, aunque todavía tendrá que esperar dos semanas para saber si es equipo de semifinales.
REAL MADRID: Casillas; Salgado, Mejía, Helguera, Bravo (Pavón, m.28); Guti (Borja, m.76), Beckham, Figo, Zidane; Raúl y Ronaldo (Solari, m.81).
MONACO: Roma; Evra (El-Fakiri, m.88), Squillaci, Rodríguez, Givet; Bernardi, Zikos, Rothen, Cissé (Plasil,m. 65); Morientes y Giuly.
GOLES: 0-1, m.42: Giuly. 1-1, m.50: Helguera. 2-1, m.70: Zidane. 3-1, m.75: Figo. 4-1, m.80: Ronaldo. 4-2, m.82: Morientes.
ARBITRO: Lubos Michel (ESQ).
CAMPO: Santiago Bernabéu.