BUENOS AIRES.- Diego Armando Maradona se mantuvo hoy en su cuarto día de internación con pronóstico "reservado" y con respirador artificial, pero bajo "parámetros estables", mientras despunta un debate sobre cómo recuperar al ex rey del fútbol.
El parte médico de la clínica Suizo-Argentina identificó a la bacteria detectada como "estreptococo beta hemolítica" y agregó que el estado de Maradona "sigue requiriendo drogas para mantener estabilizada la función vascular con valores estables".
"Hablé con la familia (de Maradona) y me dijeron que todo está bien, que el cuadro va mejorando", reveló Juan Carlos Blumberg, un empresario de reciente notoriedad en Argentina, por impulsar una cruzada antiviolencia tras el asesinato de su hijo.
Tras expresar que dialogó con la ex esposa de Maradona, Claudia Villafañe, y con sus hijas Dalma y Giannina, Blumberg relató a la prensa, en la puerta de la clínica, que todas ellas le brindaron "un cuadro más tranquilizador", confirmando la tendencia de leve mejoría en la salud del ex crack.
Maradona, de 43 años, fue internado de urgencia con una infección pulmonar, en medio de versiones sobre consumo de cocaína, como había ocurrido en enero de 2000, cuando sufrió una sobredosis provocada por su adicción a las drogas, que deterioró notablemente su corazón.
En tanto, las escasas diez líneas con algunos términos médicos inaccesibles para el lenguaje común de los partes médicos parecen resultar cada vez más escuetos para la prensa y aficionados que realizan guardias de hasta 24 horas frente a la clínica de Buenos Aires.
Así, las noticias centrales parecen puestas en el aliento de los fanáticos, la llegada de algún familiar a la clínica y la presencia cada vez mayor de corresponsales extranjeros cuya opinión es requerida por la prensa local.
Cardiólogo brasileño recomienda trasplante de corazón
La sensación de que Maradona logrará salvar esta situación inició a su vez un debate sobre cómo actuar para que el ex crack comience un proceso serio de recuperación y no cumpla las "crónicas anunciadas" que vaticinan lo peor.
Un programa del Canal 9 de la TV local aseguró que la familia de Maradona debate la posibilidad de solicitar por vía judicial la internación del ex crack, sabido que éste resiste realizar procesos más profundos, aunque su vida corra cada vez mayor peligro.
En Brasil, el médico Nabil Ghorayeb advirtió que "la solución antes de la muerte puede ser un trasplante de corazón".
"El corazón de una persona normal tiene fuerza 56. Hoy, Maradona está con 23. Cuando cae por debajo de 20, el paciente precisa de un transplante. Pero no sería inmediato pues él no aguantaría", señaló Ghorayeb al diario deportivo Lance!.
Ghorayeb, titular del grupo de estudios sobre cardiología deportiva de la Sociedad Brasileña de Cardiología, agregó que "por la obesidad que presenta, la caja toráxica (de Maradona) está llena de grasa y él no consigue respirar".