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| El adiós a la casa alba |
Poco después de la subasta, una mujer de unos 70 años llegaba al piso 6 del céntrico Hotel Galerías. Vestida con una camiseta del club ya algo desgastada, pedía a gritos el nombre la institución que había comprado la sede. Ahí, donde había celebrado más de 20 títulos en sus 50 años como socia honoraria. "María Colo Colo", se hacía llamar.
Pero el representante de los nuevos dueños ya no estaba. Antes de retirarse, se había referido al posible enojo de algunos hinchas por la compra: "No tenemos temor", dijo. "Creemos que toda la gente es racional".
Poco después, la veterana fanática de los albos amenazaba entre lágrimas con quemarse "a lo bonzo" en caso de una posible venta del estadio Monumental. |
SANTIAGO.- La sindicatura que administra al quebrado Club Deportivo y Social Colo Colo recaudó hoy 465 millones de pesos para pagar una mínima porción de la deuda que mantiene la institución con sus acreedores, tras rematar la histórica sede de Cienfuegos y el Teatro Monumental.
Con un golpe de martillo simbólico de Enrique Calvo, ante la presencia del notario público René Benavente, se decretó la subasta de ambos activos tras breves diez minutos que sólo sirvieron para leer las ofertas únicas hechas por sus nuevos propietarios.
La sede de Cienfuegos fue subastada en 280 millones de pesos a la universidad Alberto Hurtado, que estuvo representada en el hotel Galerías por el vicerrector Carlos Lacalle.
El ingeniero comercial y contador auditor afirmó que la institución educacional aún no define con claridad cuál será el nuevo uso de la construcción, pero que su compra corresponde a los planes de expansión del establecimiento, que ya posee otras propiedades en la misma manzana. Lo que sí está claro es que la fachada continuará siendo la misma, ya que al ser una zona de conservación histórica no se pueden realizar modificaciones significativas.
El Teatro Monumental, en cambio, fue vendido en 185 millones de pesos a Comercial Veneto, representada por José Ignacio Aravena. La empresa, ligada al rubro de espectáculos, deberá hacerse cargo de las deudas del inmueble por cuentas de agua y luz pendientes, además de las contribuciones, totalizando cerca de 223 millones de pesos adicionales al precio mínimo de la subasta.
Tras completar la compra, Aravena manifestó que el teatro no sufrirá cambios radicales, y que además a los colocolinos se les "dará algún día especial dentro de la semana o dentro del mes para que puedan hacer sus actividades".
Las propiedades quedan a disposición de sus nuevos dueños al momento de la firma de la escritura y su inscripción en el Conservador de Bienes Raíces. Esto debería completarse en un plazo aproximado de un mes.
Según el síndico titular del club, Patricio Jararme, el dinero recaudado permitirá pagar sólo un 9% de las deudas más urgentes con los trabajadores de la institución (de unos 6 mil millones), pero la suma está muy lejos de suavizar los 22 mil millones de pesos de deuda total verificada de la institución alba.
"Tenemos que buscar la fórmula actual para poder transformar al club y generar los fondos a través de una venta o un sistema de transformación", comentó el abogado, quien comentó que se está trabajando en un proyecto que permita tener un "club saneado y permanente".
Sobre una posible venta del estadio Monumental, el síndico señaló que se trata de de un tema "que tiene que ver con la inmobiliaria", pero en caso de ser desafectado, generaría los recursos para construir un nuevo campo deportivo.
Con historia incluida
El Teatro Monumental se ubica en San Diego 852, posee un aforo de ocho mil espectadores y comprende cinco mil metros cuadrados construidos (terreno de 4.116), que incluyen seis locales comerciales, cuatro oficinas de administración, camarines y un subterráneo con estacionamientos por calle Lingue.
Inaugurado en 1936 como Teatro Caupolicán, recibió bajo su antigua denominación a artistas como Louis Armstrong, Claudio Arrau, Bill Halley y Julio Iglesias.
Quebrado en 1984, Colo Colo lo adquirió vía remate en 1991 e invirtió 250 millones de pesos en su remodelación.
En 2003, cuando se llamó a remate, se determinó un avalúo fiscal de 856 millones 696 mil pesos.
La sede de Cienfuegos 41 corresponde a una casa construida en 1926 por Ismael Edwards Matte, quien también fue su primer dueño. Comprende 1.700 metros cuadrados construidos sobre un terreno de 935 m2.
Colo Colo la adquirió en 1953 bajo la presidencia de Antonio Labán. En dicha mesa directiva participaba Rafael Errázuriz Edwards, quien dio el dato que su tío Ismael la ponía en venta.
Con el tiempo, la casona se transformó en un símbolo albo. Allí realizó su fiesta de matrimonio Carlos Caszely en 1973 y firmaron sus contratos grandes jugadores del equipo (como Patricio Yáñez).
En los últimos días de la administración de Dragicevic fue remodelada en el primer piso para albergar las oficinas de los proyectos "Super Estadio" y "Super Socio". Con la quiebra sus puertas cerraron. En 2003 se estableció una postura mínima de 500 millones de pesos, la que ahora bajó a 280 millones.
