VIÑA DEL MAR.- Es uno de los grandes ausentes en la cita tenística de Viña del Mar, donde el año pasado fue finalista, y mientras se recupera de la operación en su cadera derecha, Gustavo Kuerten dice no estar preocupado por su caída en el ranking.
"La verdad es que el ranking no es mi principal preocupación y no he pensado mucho en eso", dijo Kuerten a la agencia DPA desde su ciudad natal de Florianópolis. "Hoy mi lucha es con la rehabilitación y no con los adversarios y el ranking".
Actualmente, el tres veces campeón de Roland Garros se ubica en el puesto 52 del escalafón de la ATP, pero en las próximas semanas caerá aún más bajo: perderá los 120 puntos de su final en Viña del Mar, y los 175 del título en Costa de Sauipe, ambos del año pasado.
De esta forma, dejará el grupo de los "top 70" -algo que no ocurría desde que ganó en París en 1997-, y con seguridad será superado por su compatriota Ricardo Mello, que esta semana figura en el puesto 56.
Ante publicaciones de la prensa de su país, que mencionaron que Kuerten aún no cursó a la ATP el pedido de "ranking protegido", el brasileño respondió que "cuando llegue el momento de volver a jugar ya hablaré con la ATP del tema. Ahora mi principal preocupación es recuperarme bien".
En realidad, Kuerten todavía no necesita pedir la protección del ranking, dado que tiene que ser solicitada por el jugador después de seis meses sin participación en el circuito y no antes, según la ATP. Kuerten jugó por última vez en el US Open, y todavía faltan unas semanas para que se cumpla ese plazo.
Una vez que la medida sea solicitada, la ATP calculará un promedio del ranking de las tres semanas posteriores a la lesión del jugador, que servirá como base de entrada para los torneos que dispute en los ocho meses siguientes a su regreso.
Este "ranking protegido" es sólo para los efectos del ingreso del jugador en los torneos, y no influye en el listado semanal dado a conocer por la ATP, ni para las designaciones de cabeza de serie.
El ex número uno del mundo fue operado por segunda vez en su cadera derecha en septiembre de 2004, en la ciudad estadounidense de Pittsburgh.
"Los doctores están contentos con mi recuperación. Hoy estoy haciendo mucho más la parte de preparación física que la de fisioterapia, ejercicios ya adaptados al tenis, para que cuando vuelva a entrenar mi cuerpo no sienta mucho la diferencia", explicó.
El tenista pasó todo el mes de enero en su piso nuevo en Praia Brava, su favorita en la isla de Florianópolis. Desde allí realiza su trabajo de rehabilitación y también dedica su tiempo libre al Instituto que lleva su nombre.
Kuerten, que fue campeón en el torneo de Santiago 2000, dice estar feliz y tranquilo, y tener "la certeza" de que volverá fuerte y bien al circuito.
"Espero volver a entrenar fuerte en unas semanas y todavía no he planificado una fecha o un calendario para volver, pero seguramente me gustaría llegar en mis mejores condiciones a Roland Garros y poder jugar unos torneos de tierra en Europa antes", agregó el mejor tenista brasileño de la historia.
Mientras tanto, los amantes del tenis en Chile lamentan que la magia de Kuerten esté ausente en el Club Naval Las Salinas, donde el año pasado perdió la final ante el local Fernando González, un sentimiento que compartirán también los espectadores de los próximos certámenes de Buenos Aires, Costa do Sauípe y Acapulco.
