BUENOS AIRES.- Después de superar una serie de problemas físicos que lo alejaron de las competencias oficiales por 112 días, Marcelo Salas volvió en gloria y majestad con dos tantos de muy buena factura ante Argentinos Juniors.
Al respecto, el ariete de River Plate no ocultó su alegría y señaló que el día en que se de cuenta que no puede jugar, se irá de River.
"Esta actuación es muy importante para mí porque tuve muchos problemas musculares en los últimos tiempos. Deseo que la gente se de cuenta de que todavía puedo darle mucho a River, porque el día que sepa que no puedo hacerlo, me voy a ir", sostuvo el delantero a
Olé tras el empate 3-3 entre River y Argentinos.
Salas agregó que "esto me da mucha satisfacción, porque además es el cumpleaños de mi hija (Camila) y porque pude devolverle alegría a la hinchada, que me recibió maravillosamente y disfrutó de mis goles".
Sin embargo, el delantero reconoció que sintió molestias físicas después del cotejo y que posiblemente no estará en un ciento por ciento para encarar el duelo del miércoles por Copa Libertadores ante Nacional de Montevideo.
"Ahora, sólo me tengo que ocupar de jugar, de entrenar y de mantener el equilibrio. Estaba contemplado que jugara 45 minutos y terminé con lo justo, sentía las piernas pesadas y un poco duras. Además, terminé con molestias en la musculatura (gemelo derecho), pero nada grave. Tengo que ir con precaución", comentó el ex atacante de Universidad de Chile, que seguramente jugará de nuevo el próximo fin de semana ante Instituto de Córdoba.
Otro que manifestó su satisfacción por el rendimiento de Salas fue el técnico de River Plate, Leonardo Astrada, quien comentó que "Marcelo demostró lo importante que puede ser. Además, quedó claro que está en plenas condiciones".
