LOS ANGELES.- Dwyane Wade anotó 39 puntos y regaló a los Miami Heat el título la Conferencia Este tras ganar a los Chicago Bulls por 104-86, a pesar de no contar con Shaquille O’Neal, víctima un virus estomacal.
Los Heat culminaron su gran temporada regular en la noche del martes, donde además consiguieron un récord de la franquicia al lograr 18 triunfos consecutivos en su cancha. Y todo gracias a un Wade estelar, que se postula como uno de los grandes candidatos a llevarse también el título de Jugador Más Valioso (MVP).
"Con O’Neal ausente, sentí que debía asumir la responsabilidad, pero también conté con la ayuda del resto de mis compañeros, que hicieron un gran trabajo. El título de conferencia es el premio a tanto esfuerzo", dijo Wade.
El alero Damon Jones añadió 17 puntos y Udonis Haslem hizo 16 más para unos Heat que no pierden en el American Airlines Arena desde el 21 de enero, cuando cayeron ante los Indiana Pacers.
El equipo de Miami dejó resuelto el partido antes del descanso, cuando lograron una ventaja de 20 puntos. Cuando el encuentro viajaba con placidez, el argentino Andrés Nocioni hizo una falta durísima sobre Wade y Haslem perdió los nervios al defender a su compañero, iniciando una pelea con el jugador de los Bulls.
Haslem lanzó a Nocioni hacia la segunda fila de espectadores y los árbitros expulsaron de inmediato a los dos jugadores, a quienes les espera una fuerte sanción.
Nocioni y Ben Gordon, ambos con 14 puntos, fueron los máximos anotadores de unos Bulls que jugaron sin Eddy Curry, aunque mantienen la cuarta mejor marca de victorias en el Este, igualados con los Washington Wizards.
Los Heat viven uno de los mejores momentos en la historia de su franquicia. "Obviamente, lo que cuenta es lo que hagas en el 'play off', así funciona este negocio. Pero pase lo que pase a partir de ahora, estoy orgulloso de lo que ha conseguido este equipo", añadió Stan van Gundy, su entrenador.
El fin de la era de los Lakers
La otra noticia de la jornada fue la eliminación de Los Angeles Lakers, que se quedarán fuera de los playoffs por primera vez desde 1994, tras perder por 125-99 ante los Phoenix Suns, el equipo con la mejor marca de la liga.
Los Lakers sumaron su duodécima derrota en los últimos 13 partidos y se convirtieron en el séptimo equipo de la historia en quedarse fuera de los playoffs tras jugar una final de la NBA en la temporada anterior.
Los Suns arrasaron a los Lakers desde la línea de tres puntos y consiguieron 17 triples, nuevo récord de la franquicia. Quentin Richardson convirtió siete lanzamientos desde la larga distancia y concluyó con 25 puntos.
Caron Butler, con 30 tantos, fue el máximo anotador de unos Lakers que jugaron sin Kobe Bryant, quien se perderá el resto de la temporada por una lesión en la pierna derecha.
