BUENOS AIRES.- Una agrupación defensora de la cultura indígena denunciará por discriminación a un club de la Segunda División del fútbol argentino, después de que uno de sus hinchas tratara de "mapuche de mierda" a un jugador rival.
La denuncia contra el Atlético Rafaela será presentada ante la Justicia y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) por la organización Defensa de la Cultura Indígena, de la sureña ciudad de Comodoro Rivadavia, informó hoy su presidente, el cantautor Oscar Payaguala.
En declaraciones a la agencia estatal de noticias Télam, Payaguala indicó que la presentación judicial obedece a la agresión verbal que sufrió el jugador Leonardo Herrera en el partido en el que su equipo, Comisión de Actividades Infantiles (CAI), se enfrentó este lunes con el Atlético Rafaela.
Durante el encuentro, un aficionado gritó a Herrera "mapuche de mierda" e "indio muerto de hambre", según señaló el jugador.
"Hemos decidido denunciar al club Atlético Rafaela para que de una vez por todas se erradiquen este tipo de actitudes intolerantes y racistas", explicó Payaguala.
"Esperamos que la AFA sancione con la máxima dureza a sus responsables para que no se repitan estos actos que indignan a nuestro pueblo mapuche y a toda la humanidad", destacó.
El titular de la organización anticipó que también denunciará el hecho ante el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo.
La violación a la ley sobre discriminación establece penas "de hasta tres años de prisión efectiva", según comentó el dirigente indigenista.
El episodio más reciente sobre discriminación racial en un estadio de fútbol de Argentina ocurrió hace unos días, cuando varios hinchas del Talleres de Córdoba, también de la Segunda División, exhibieron banderas con cruces esvásticas.
Por este hecho, el club cordobés recibió una sanción económica por
parte de la AFA.
En abril pasado, la Justicia de Brasil abrió un proceso contra el defensa argentino Leandro Desábato, acusado de haber ofendido con términos racistas al delantero brasileño Grafite durante un partido de la Copa Libertadores entre el bonaerense Quilmes y el Sao Paulo de ese país.
Incluso, Desábato estuvo preso en Sao Paulo durante dos días después de la acusación de Grafite y sólo fue liberado tras el pago de una fianza.
El incidente provocó una intensa polémica tanto en Brasil como en Argentina ya que algunos jugadores y técnicos, incluso brasileños, lo consideraron exagerado.
