ZÜRICH.- La Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) espera que la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) le remita el informe sobre el escándalo de arreglo de partidos en el fútbol brasileño, en el que está implicado un árbitro internacional.
"Aún no tenemos una comunicación oficial. En cuanto la CBF nos remita el informe lo estudiaremos", afirmó un portavoz de la FIFA.
Este fin de semana se destapó en Brasil el escándalo del arreglo de partidos por parte del árbitro FIFA Edilson Pereira de Carvalho y de Paulo José Danelon, que fueron detenidos el sábado como parte de una investigación contra una banda mafiosa.
"Conocemos el caso y nos consta que la CBF nos va a dar los datos", agregó el portavoz FIFA. Hasta entonces, el organismo internacional no decidirá qué hacer y se negó a aventurar una sanción. "Cada caso es individual, pero hasta que no haya nada oficial no analizaremos el caso", afirmó.
Pereira de Carvalho admitió ante la policía que manipuló resultados de partidos para beneficiar a empresarios que realizaban apuestas en Internet. El árbitro fue separado de los cuadros de colegiados por la CBF, cuya su intención es pedir a FIFA que adopte una medida similar.
Los dirigentes de los clubes de fútbol en las últimas posiciones de la tabla del campeonato brasileño, pidieron la anulación de los once partidos dirigidos por Pereira de Carvalho desde enero, e incluso se habla de suspender todo el torneo.
"No existe ninguna posibilidad de anular el campeonato, pero si se comprueban fraudes, los partidos volverán a ser realizados", afirmó Luis Zveiter, el presidente del Superior Tribunal de Justicia Deportiva (STJD), al que la CBF elevó el caso.
"La FIFA no tiene competencias para decidir sobre esos asuntos. Estaremos pendientes, pero depende de la CBF", afirmó el portavoz del organismo del fútbol internacional.
Según la policía, Pereira de Carvalho recibía entre 4.400 y 6.600 dólares por partido "arreglado". Los empresarios, a su vez, obtenían importantes ganancias ya que apostaban entre 88.000 y 176.000 dólares.
Junto a los dos árbitros, también fue arrestado el empresario Nagib Fayad, presuntamente el jefe del grupo.
