Recuerdos de Champions: La tragedia de Heysel
SANTIAGO.- La final de la Champions League entre la Juventus de Arturo Vidal y el Barcelona de Claudio Bravo está a la vuelta de la esquina. Sólo quedan cuatro días para que en Berlín se dirima al ganador del torneo europeo.
Y hay varias finales que han pasado la historia por situaciones tanto dentro como fuera de la cancha. Una de ellas ocurrió hace 30 años atrás en Bélgica y cuando el certamen aún era denominado Copa de Europa.
Fue el 29 de mayo de 1985. Durante aquella jornada se desató la "Tragedia de Heysel", que dejó como saldo 39 hinchas fallecidos en la antesala del choque entre la Juventus y Liverpool en el estadio Heysel de Bruselas.
Para aquella final, la "Vecchia Signora" y el cuadro de Anfield llegaban como los mejores equipos de la actualidad. Mientras los ingleses venían de ser monarcas de la edición de 1984, la Juventus contaba con varios campeones mundiales en España 82 y con un Michel Platini que por ese entonces brillaba como el mejor futbolista europeo.
Por ese entonces, la violencia en el fútbol ya estaba propagándose en el Viejo Continente debido a la irrupción de los "hooligans", aficionados ingleses violentos que arrasaban en cada una de las ciudades que visitaban. Esto, sumado a una mala organización, desencadenó la tragedia.
La cronología de los hechos
La UEFA decidió la venta de 60.000 boletos, de los cuales en su mayoría fueron adquiridos por ingleses e italianos. Sólo unas pocas entradas fueron puestas a disposición para los hinchas belgas.
Sin embargo, muchos de esos tickets para la parcialidad local cayeron en manos de forofos de la Juventus y Liverpool, por lo que coincidieron en una misma zona.
La tragedia comenzó a gestarse apenas una hora antes del pitazo inicial. La zona Z, que no tenía asientos y emplazada detrás de uno de los arcos del reducto de Bruselas, estaba ocupada por los itálicos, mientras que la X, donde se encontraban los británicos, se ubicaba al lado.
Y se inició la debacle. Los ingleses comenzaron a tirar proyectiles y se enfrascaron con los italianos, abalanzándose sobre los propios, lo que produjo una avalancha humana.
Muchos hinchas de la Juventus quedaron atrapados en una de las vallas, que eran fijas y no contaban con salidas de emergencia. Los incidentes también violentaron a los restantes espectadores presentes, quienes saltaron al terreno de juego con palos para agredir a los hinchas del equipo contrario.
Mientras se desarrollaba la batahola, los encargados de seguridad sucumbían ante tantos forofos enajenados. La situación se extendió varios minutos, mientras los casos de asfixia, aplastamiento y crisis de ansiedad se multiplicaban entre el mar de gente aprisionada en la Zona Z.
Las ambulancias entraron al estadio Heysel, pero ya era muy tarde para algunos. 39 personas murieron, de los cuales 32 eran hinchas de Juventus, cuatro eran belgas, dos provenían de Francia y uno era británico.
Pese a la gravedad de los hechos, la UEFA determinó que de igual forma se jugara el pleito, por miedo a peores manifestaciones. Ganó la Juventus 1-0 con gol de Platini, pero lo futbolístico poco importaba.
Sanciones y llamado a acabar con Hooligans
Finalmente, tras los acontecimientos, el organismo europeo aplicó mano dura contra el fútbol inglés: cinco años sin competencia europea para sus clubes , haciéndoles un llamado a terminar con el movimiento hooligan, y seis años de suspensión para el Liverpool en torneos organizados por UEFA. Además, la FIFA determinó prohibir las zonas sin asientos.
30 años después, la Tragedia de Heysel aún es recordada como uno de los hechos más lamentables en la historia del fútbol. Aquel día la violencia pudo más y se escribió otro triste capítulo en el balompié mundial...