DOVER.- Un funcionario aduanero halló los cadáveres de 58 supuestos inmigrantes ilegales en la caja de un camión frigorífico en el puerto de Dover, lo que desencadenó una investigación policial a nivel internacional.
Otras dos personas fueron halladas con vida en el vehículo de registro holandés, que transportaba tomates y que cruzó el Canal de la Mancha en un ferry desde el puerto belga de Zeebrugge. La unidad frigorífica estaba apagada.
Los muertos -54 varones y cuatro mujeres- y los sobrevivientes parecían ser del lejano oriente, posiblemente chinos, dijo el ministerio del Interior.
La policía arrestó al conductor holandés del camión. El vehículo suscitó sospechas porque estaba registrado a nombre de una empresa, Van Der Spek, que no había usado la ruta antes, dijeron los operadores del ferry, P and O Stena Line.
La policía guardaba a los sobrevivientes y declinó citar el nombre del hospital, al parecer por temor a que los hombres puedan ser asesinados o secuestrados para impedir que identifiquen a los organizadores del intento de ingreso ilegal a Gran Bretaña.
Los sobrevivientes "son muy importante para la investigación", afirmó el vocero policial del condado de Kent, Mark Pugash.
Las autoridades prometieron intensificar sus esfuerzos por reprimir las bandas internacionales dedicadas al movimiento de inmigrantes ilegales, que cobran hasta 20.000 libras (30.000 dólares) por persona.
Los sobrevivientes, dos hombres, fueron hospitalizados y se espera que se recuperarán, pero estaban muy traumatizados por su odisea como para ser interrogados inmediatamente.
"Son muy, muy importantes para la investigación", dijo el vocero Mark Pugwash de la policía del condado de Kent.
Las autoridades aduaneras dijeron que el camión, que llegó al filo de la medianoche, fue inspeccionado porque respondía al "perfil" de los vehículos sospechosos.
"La compañía no había usado nuestra ruta antes y el conductor pagó la tarifa en efectivo en Zeebrugge", dijo la portavoz Vivienne Macey, de la firma P and O Stena Line.
El primer ministro Tony Blair, que se encuentra en Portugal para asistir a una reunión de líderes de la Unión Europea, dijo que el desastre era "objeto de una importante investigación criminal".
"Resalta la importancia de erradicar este comercio en seres humanos", dijo Blair en una entrevista con la BBC.
La policía británica y sus colegas del continente investigaban el trayecto que siguió el camión antes de abordar el ferry.
La policía improvisó una morgue en Dover. No quisieron conjeturar si las víctimas murieron sofocadas.
El camión partió el domingo de Bélgica, el día más caluroso en lo que va del año en Inglaterra y partes del norte de Europa, con temperaturas de 30 grados centígrados.
