QUITO.- Maestros de educación pública de Ecuador comenzaron el jueves una huelga de hambre, endureciendo el paro que realiza el sector desde hace seis semanas en demanda de aumentos salariales.
Quince profesores del puerto de Guayaquil, considerado la capital económica del país, iniciaron la medida, que según la dirigencia del magisterio se extenderá a nivel nacional.
"Los que no están aquí, están haciendo huelga de hambre en sus casas, porque no tenemos con que comer", dijo una de las maestras que participan en la medida.
El presidente Gustavo Noboa declaró a periodistas estar dispuesto "a aguantar" la protesta "el tiempo que sea", al ratificar su negativa a acceder a las demandas de los huelguistas.
La radicalización de la huelga se produjo tras el arresto el miércoles de Aracely Moreno, presidenta de la Unión Nacional de Educadores (UNE), quien estaba requerida por la justicia por "irrespetar el derecho constitucional de la educación y ofender la majestad del presidente de la República".
"Exigimos la inmediata liberación de la compañera Moreno, caso contrario estudiantes, maestros y padres de familia nos volcaremos a las calles hasta lograr su libertad", dijo a periodistas Stalin Vargas, diputado y dirigente de los maestros.
La huelga, iniciada por 143.000 maestros de escuelas primarias y de enseñanza media fiscales el 15 de mayo, mantiene a casi tres millones de estudiantes sin clases.
El gobierno señaló que combatirá el paro de maestros con los recursos legales a su alcance, defendiendo la Constitución.
"Para garantizar la educación adecuada de los jóvenes, (la Constitución) prohibe la paralización de un servicio público tan importante como el de la educación", dijo a periodistas Marcelo Santos, secretario general del gobierno.
"Hay una ley que respetar y cuando la autoridad actúa se da una señal al país de que no puede primar la arbitrariedad", añadió.
Autoridades de gobierno insisten en que no serán pagados haberes a los maestros que permanezcan en huelga.
