THURMONT.- La cumbre israelí-palestina concluyó hoy sin un acuerdo, informó hoy un portavoz de la Casa Blanca, y el Presidente Bill Clinton se prepara a regresar a Washington a hacer un anuncio.
"El Presidente ha concluido que las partes no son capaces de llegar a un acuerdo en estos momentos", dijo el portavoz Joe Lockhart.
Había quedado claro antes que no habían avances importantes a pesar de una oferta del Primer Ministro Ehud Barak al líder palestino Yasser Arafat, de reconocer cierta soberanía palestina sobre el sector oriental de Jerusalén.
Fuentes palestinas dijeron que el punto final se dio cuando los israelíes rechazaron la exigencia palestina de tener soberanía toda la amurallada Ciudad Vieja de Jerusalén, ofreciendo en cambio acceso a la mezquita Al Aqsa, le tercer lugar más sagrado del Islam.
Arafat reaccionó airado a la posición israelí, dijeron las fuentes.
Hoy a las 3 de la madrugada, Arafat envió una carta a Clinton, informándole que no veía razones de continuar la cumbre porque la posición israelí sobre Jerusalén no conduciría nunca a un acuerdo, dijeron las fuentes palestinas.
Reacciones no tardaron en llegar
"Este fracaso es una nueva indicación de que la única alternativa que nos queda es la resistencia", dijo el líder del grupo extremista islámico Hamas, el jeque Ahmed Yassin. "Sólo por la fuerza podremos defender nuestros derechos ... Estamos listos para ser mártires y diremos brevemente: pagarán caro si piensan en atacarnos y reocupar nuestra tierra".
El fracaso surge a pesar de intensos esfuerzos por parte de Clinton, quien regresó a Camp David la noche del domingo tras un viaje a Japón.
Por segundo día consecutivo Clinton se trasnochó anoche, supervisando arduas negociaciones, dijo el portavoz presidencial P.J. Crowley aunque no se informó exactamente con quién se reunió el mandatario.
Cinco horas y media después Clinton se despertó para realizar más reuniones con sus propios asesores, entrando así al 15o. día de la cumbre, dijo Crowley.
La noche anterior, Clinton se quedó hablando con representantes de ambas partes hasta las 5 de la madrugada.
A lo largo de la cumbre, surgieron versiones de que una u otra parte amenazó con hacer sus maletas y partir. El miércoles pasado, la Casa Blanca incluso llegó a anunciar que la reunión había fracasado.
El principal punto de discordia es el futuro de Jerusalén, que ambos bandos reclaman como su capital. También está en juego la suerte de millones de refugiados palestinos y las fronteras de un futuro estado palestino.
Ayer el portavoz presidencial Joe Lockhart dijo a reporteros que mientras Clinton considere "que las discusiones son sustantivas y pueden conducir a un acuerdo, él se quedará aquí y mantendrá a ambas partes aquí".
Las fuentes israelíes, que declinaron ser identificadas, dijeron a la AP que en estos momentos, los palestinos no han respondido bien a la propuesta israelí de concederles soberanía sobre las zonas de mayoría árabe en el sector oriental de Jerusalén. Arafat desde un principio ha exigido soberanía sobre toda Jerusalén oriental, incluyendo la amurallada Ciudad Vieja.
Israel insiste en que Jerusalén no debe ser dividida y debe permanecer bajo soberanía suya. Los palestinos quieren dividirla en dos y quedarse con la parte oriental.
El fracaso se dio poco antes de que Clinton viajara a Arkansas para asistir al funeral de una amiga.