TORONTO.- Un avión Concorde de la compañía británica British Airways, que cumplía el trayecto Londres-Nueva York, debió realizar un aterrizaje de emergencia en la localidad canadiense de Gander, región de Terranova, informaron hoy fuentes aeroportuarias.
Los informantes revelaron que la nave, que realizaba el vuelo número 003, experimentó "dificultades técnicas".
El aterrizaje de emergencia se produjo apenas cinco días después de que una nave similar de la empresa Air France se estrellara tras decolar de un aeropuerto parisino, episodio en el que murieron al menos 113 personas.
El Concorde británico debió aterrizar hoy Terranova ante un persistente olor a combustible quemado, advertido por pasajeros y tripulación en el interior de la cabina, según explicó la propia compañía de bandera.
"El vuelo fue desviado a Gander como medida puramente precautoria ante el olor acre que se percibió en la cabina", intentó tranquilizar un vocero de la empresa aerocomercial.
British Airways sufrió también hoy otro problema con un Concorde: una nave similar partió con una hora de retraso desde el aeropuerto londinense de Heatrow con destino a Nueva York, ya que en una inspección previa al decolaje fue advertida una falla en el reabastecimiento de combustible.
Pese a los problemas, British Airways adelantó que no tiene previsto suspender los vuelos que realizan sus siete aeronaves de ese tipo, aunque voceros de la empresa reconocieron: "no volaremos si consideramos que las condiciones no son absolutamente seguras".
