OSLO.- El dirigente palestino, Yaser Arafat, no pudo reunirse hoy con el ex primer ministro israelí Simón Peres en Oslo, pese a que el Gobierno noruego había programado esta cita.
El único contacto que tuvieron los dos políticos fue telefónico, "una conversación fructífera", dijo el líder palestino en una breve conferencia de prensa.
La ajustada agenda que Arafat desarrolló hoy, con sus visitas previas a Moscú y Helsinki, provocó un retraso de tres horas en su visita a Noruega.
Todos los preparativos, incluida una cena conjunta con los dos protagonistas de los acuerdos de Oslo y representantes del Gobierno noruego, fueron cancelados y el dirigente palestino tuvo que desarrollar toda su actividad en el aeropuerto internacional de Gardemoen, a unos 40 kilómetros de Oslo.
"Siento que las reuniones tengan que desarrollarse en Gardemoen", se disculpó Arafat en rueda de prensa, y recordó que estaba obligado a volver a volar para asistir a la importante reunión que mañana debe celebrar el Consejo Palestino y su posterior viaje a China por la tarde.
"Existe una gran necesidad de lograr la paz, especialmente a causa de Jerusalén, no sólo para los palestinos, israelíes y árabes, sino para toda la comunidad internacional. Todas las diferentes religiones deben ser respetadas en Jerusalén", indicó Arafat.
En una reunión con el Primer Ministro, Jens Stoltenberg, y el canciller noruego, Thorbjorn Jagland, Yaser Arafat informó de la situación del proceso de paz después de las últimas negociaciones frustradas de Camp David, en EEUU.
Mientas el líder palestino cumplía con estos compromisos, Simon Peres, que ya se encontraba en Oslo desde hacía horas, declinó trasladarse al aeropuerto para reunirse con Arafat, pues el comienzo del "sabat" judío le impidió utilizar un automóvil.
Peres fue invitado por el Gobierno noruego después de que Arafat decidiera realizar una escala en Oslo.
Peres, en declaraciones formuladas a su llegada a Gardemoen, se mostró de acuerdo con las afirmaciones del ministro de Justicia israelí, Yosi Beilin, en el sentido de que esta gira diplomática de Arafat es una pérdida de tiempo.
"Pero encontrarnos cara a cara en Oslo no es ninguna pérdida de tiempo", dijo Peres en breve rueda de prensa, y agregó que en Oslo no estaba previsto negociar, sino "únicamente pasar revista a la marcha del proceso (de paz)".
Arafat y Peres se reunieron por vez primera en la capital noruega en 1993, durante las negociaciones secretas que desembocaron en la firma de los Acuerdos de Oslo.
Al año siguiente, ambos protagonistas, junto con el desaparecido ex primer ministro Isaac Rabin, recibieron el Premio Nobel de la Paz.