BOGOTA.- Un coche-bomba estalló ayer en Bogotá, sin causar víctimas, mientras tropas ejército apoyadas por aviones y helicópteros militares sostenían intensos combates con los principales grupos guerrilleros de Colombia.
Informes oficiales dijeron que el saldo provisional es de siete rebeldes y siete soldados muertos.
El auto repleto de explosivos estalló en el barrio Sierra Morena, al sur de la ciudad, cerca de una estación de carabineros de la policía, dijo el general Alfredo Salgado, subdirector de la Policía Nacional.
Aparentemente el atentado iba dirigido contra una caravana militar que habitualmente pasa por la zona, pero no hubo víctimas porque los militares cambiaron la rutina de sus movimientos, explicó el jefe policial.
Entretanto, el mayor combate se libraba en Roncesvalles, una población situada a 200 kilómetros al suroccidente de Bogotá, que estaba en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) desde el mes pasado cuando arrasaron gran parte del poblado y dieron muerte a 13 policías.
"Tenemos el control de la población y estamos combatiendo con los subversivos", dijo ayer el general Hernán Cadavid Barco, comandante de la Sexta Brigada del ejército, en una entrevista televisada desde Roncesvalles.
Agregó que ayer murieron cinco guerrilleros y un soldado y las tropas de infantería, con el apoyo de la fuerza aérea están combatiendo con unos 500 rebeldes en las montañas que rodean a la población.
Las FARC, la mayor y más antigua guerrilla del país, también atacaron el sábado la central hidroeléctrica de Anchicacayá, a 350 kilómetros al occidente de Bogotá, pero fueron repelidos por tropas del ejército que registraron cinco muertos, siete heridos y un desaparecido, informó la Tercera Brigada del ejército.
