LIMA.- Representantes del gobierno del presidente Alberto Fujimori y miembros de la oposición expresaron hoy su disposición de mantener el optimismo y la expectativa sobre negociaciones que se consideran cruciales para democratizar al Perú.
Las partes realizarán esta semana intensas tratativas para evitar que el diálogo político promovido por la Organización de los Estados Americanos (OEA) se vea inmerso en problemas de entendimiento, dijeron voceros políticos.
Para el primer vicepresidente de la república, FranciscoTudela, el diálogo ha permitido formar grupos de trabajo y "eso ya representa un enorme avance" que permitirá acuerdos concretos que puedan convertirse en iniciativas legislativas.
El gobierno, a través del ministro de Justicia, Alberto Bustamante, hizo el sábado una clara advertencia a la oposición sobre el futuro del diálogo por lo desmedido de sus demandas, como el de convocar nuevas elecciones.
Fuentes gubernamentales y de la oposición consultadas por ANSA confirmaron que se buscará "limar algunas asperezas" producidas en el curso de las negociaciones que intentan revertir la crisis política peruana, reconocida por la presencia de la OEA como facilitadora del diálogo.
Negociadores de la oposición -que pidieron no revelar su identidad, debido al compromiso de no hacer públicas sus diferencias en el curso de las conversaciones- dijeron que el gobierno pretende desconocer el plazo fijado para lograr las reformas democratizadoras.
Voceros oficiosos del gobierno también comentaron que durante las negociaciones la oposición ha generado innecesarias situaciones de confrontación con pedidos que el gobierno no está en capacidad de aceptar.
Por lo pronto empiezan a surgir posiciones del gobierno y de la oposición en torno a temas y plazos sobre los que aún no se ponen definitivamente de acuerdo, mientras el representante de la OEA, Eduardo Latorre, expuso sus buenos oficios diplomáticos para evitar eventuales quiebras del diálogo.
Cuatro son los temas, de un total de 27 propuestos por la OEA para democratizar el país, que deben tener dictámenes el próximo 19 de setiembre, fecha crucial para conocer si se producirá la reorganización del discutido Servicio de Inteligencia Nacional y la restitución de tres magistrados destituidos del Tribunal Constitucional.
También se conocerá si se producen la devolución de la nacionalidad del empresario televisivo Baruch Ivcher y el retorno del Perú a la contienda contenciosa de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
El ministro de Justicia, Alberto Bustamante, advirtió que si la oposición insiste en convocar a nuevas elecciones y reducir el periodo gubernamental del presidente Fujimori, entonces el diálogo podría frustrarse.
Para representantes del gobierno la oposición persiste en demandas que llevan a las negociaciones a "un punto de partida nuevo" y que si no se logra algún acuerdo se podría producir una ruptura o fractura que nadie espera.
El de fensor del Pueblo, Jorge Santistevan de Noriega, dijo por su parte que si no hay "avances significativos" el proceso de diálogo se deslegitimaría y un fracaso así tendría repercusiones a nivel nacional e internacional.
En las últimas semanas ha sido un secreto a voces que durante el diálogo se han presentado posiciones antagónicas entre los representantes del gobierno y la oposición, asi como amenazas de las organizaciones que representan a la sociedad civil de retirarse de las negociaciones.
El ministro Bustamante prácticamente admitió, con su advertencia, que las demandas de la oposición empiezan a colocar piedras en el camino de un diálogo que el próximo 19 de setiembre debe arrojar sus primeros resultados.
