FILADELFIA.- Estados Unidos, que este año puso en entredicho la legitimidad de la reelección del Presidente peruano Alberto Fujimori, recomendó hoy una transición abierta y pacífica a la "plena democracia", tras la sorprendente decisión de Fujimori de convocar a nuevas elecciones y anunciar que no se postulará.
Fujimori, aquejado por un escándalo que afecta a uno de sus más estrechos colaboradores, anunció anoche la convocatoria de las nuevas elecciones y su abstención a una nueva postulación.
El vocero de la Casa Blanca Jake Siewert, que acompaña en Pensilvania al Presidente Bill Clinton, destacó que Estados Unidos recomendó una reforma política en Perú desde las elecciones de mayo.
Ante la decisión de Fujimori, dijo Siewert, "esperamos que todos los elementos en el Perú colaboren para lograr un proceso transparente y pacífico a fin de lograr una plena democracia".
Tras la primera ronda de las elecciones presidenciales de mayo, Clinton solicitó una postergación de la segunda ronda debido a "temores bien documentados" de los supervisores internacionales de que Fujimori hizo trampas. Clinton dijo que la democracia depende "de las elecciones libres, justas y abiertas".
"Sin ellas, nuestras relaciones con Perú se verán inevitablemente afectadas", advirtió en aquel entonces Clinton.
Fujimori ignoró la advertencia de Clinton, y su adversario, el economista Alejandro Toledo, boicoteó la segunda ronda. Tras la reelección de Fujimori, el Departamento de Estado dijo que el "viciado proceso" hizo imposible que el Mandatario "reclamara la legitimidad".
Para fines de julio, cuando Fujimori juramentó el cargo, el gobierno de Clinton no había tomado medidas en su contra pero junto con la mayoría de las democracias del hemisferio boicoteó su inauguración y pidió al Perú que se esmerara en lograr una elecciones más democráticas la próxima vez.
La secretaria de Estado Madeleine Albright no visitó Perú cuando recorrió América latina en agosto.