MIAMI.- El alcalde del condado de Miami-Dade, Alex Penelas, declaró hoy, miércoles, el estado de emergencia tras las graves inundaciones causadas por las intensas lluvias caídas durante dos días en el sur de Florida.
Las inundaciones, que afectan a un amplio sector de Miami-Dade, han obligado a cerrar hoy las escuelas públicas y privadas, universidades y numerosos negocios.
La situación originada por un sistema de baja presión que se desplazó desde el Caribe y un frente frío también ha creado desde anoche el caos en varias de las principales vías del condado, que quedaron cubiertas de agua.
Los fenómenos meteorológicos forzaron el martes el cierre temporal del aeropuerto internacional de Miami.
Las fuertes precipitaciones, además, dejaron unos 21.000 hogares sin fluido eléctrico.
En Hialeah, una de las ciudades más afectadas del condado, un tornado tocó tierra y dañó dos residencias y un parque de bomberos.
El alcalde de Miami-Dade dijo hoy en una rueda de prensa que el estado de emergencia puede prolongarse siete días y recomendó a los residentes permanecer en sus hogares hasta que mejore la situación.
Los meteorólogos han pronosticado hoy un 50 por ciento de probabilidades de lluvia.
Se calcula que los daños causados por estas inundaciones pueden ser mayores que los ocasionados por el huracán "Irene", que azotó el sur de Florida en octubre del año pasado.