SANTIAGO.- El secretario general de la OEA, César Gaviria, dijo hoy que este organismo sigue con detenimiento las crisis desatadas en Bolivia y Perú, y recalcó que ambos problemas se resuelven por la vía legal e institucional.
"Estamos siguiendo con detenimiento la situación de crisis, de protesta social que se ha estado dando en Bolivia y le he ofrecido al Gobierno toda la colaboración que le podamos brindar", señaló el secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Bolivia vive, desde hace tres semanas, una crisis social por una huelga campesina y movilizaciones en todo el país que han dejado hasta el momento diez muertos, más de cien heridos y grandes pérdidas económicas.
"Entiendo que el Gobierno de Bolivia está en pleno uso de sus facultades buscándoles a estos problemas solución dentro de las posibilidades del Estado y también dentro del marco jurídico", consideró Gaviria.
Agregó que el Gobierno boliviano no está dispuesto a ceder por problemas legales y compromisos internacionales a algunas demandas de los cultivadores de coca.
"El Presidente (boliviano) Hugo Banzer no cree que en esos terrenos se puedan hacer las concesiones a las que aspiran los cocaleros y creo que le asiste bastante razón", subrayó el secretario del organismo americano.
Las declaraciones de César Gaviria se produjeron en el marco de un seminario sobre la Convención Interamericana contra la Corrupción, auspiciado por la OEA y el Banco Interamericano del Desarrollo (BID).
En cuanto a la situación del Perú y del ex asesor presidencial Vladimiro Montesinos en Panamá, el secretario general de la Organización de Estados Americanos defendió la vía del asilo político para solucionar el problema al recordar que en la última década el recurso del extrañamiento permitió sortear graves crisis políticas.
"A lo largo de la última década, los serios problemas y las serias amenazas a la democracia en América se han resuelto usando expedientes similares", dijo Gaviria, quien recordó algunos ejemplos como el del ex dictador paraguayo Alfredo Stroessner, el general haitiano Raoul Cedras y el ex presidente ecuatoriano Abdalá Bucaram.
"Tenemos muy pocos instrumentos para hacerle frente a estas crisis. Como ya hemos señalado, había amenazas de naturaleza militar que hacían imperioso que el Presidente Alberto Fujimori pidiera la cooperación de la comunidad internacional y en general los países latinoamericanos reaccionaron de manera positiva", destacó.
Fujimori decidió adelantar las elecciones del año 2005 el pasado 16 de septiembre, como consecuencia del escándalo de corrupción protagonizado por su principal asesor, actualmente en Panamá.
Al respecto, Gaviria dijo que Chile fue uno de los países que apoyó más activamente esta solución, así como Brasil, Argentina, Colombia y México.
"Hemos pensado que había que ayudarle a la democracia peruana a resolver su problema", subrayó al señalar que tanto el Gobierno como la oposición peruanos están definiendo los caminos de la transición política en la mesa de diálogo que promovió la OEA.
Añadió que el organismo supranacional no tiene solución para estos problemas y que eso hay que dejárselo a los peruanos "que están siendo capaces, en una situación de transición bastante compleja, de realizar acuerdos políticos que por lo demás el Congreso ha estado instrumentando".
"Me parece que esa es la manera de resolver este problema. Todos queremos que en Perú haya una transición democrática y una transición pacífica que, en la medida de lo posible, debe darse dentro del marco constitucional", concluyó.