WASHINGTON.- Especialistas de la marina han determinado con certeza que la explosión que abrió un boquete en el destructor USS Cole y mató a 17 marinos "vino desde afuera", lo cual se suma a las pruebas de que fue un acto deliberado, dijo hoy el almirante Vern Clark.
"Lo he dicho desde el comienzo, en mi opinión fue evidentemente un acto terrorista", dijo Clark, el más alto oficial de la armada, en entrevista con The Associated Press.
Oficiales navales dijeron hoy que a los 10 marineros desaparecidos del Cole se los da por muerto. Se han hallado siete cadáveres y se esperaba hallar más hoy.
"No queremos destruir las esperanzas, pero tampoco queremos generar falsas esperanzas", dijo Clark. Otros oficiales navales dijeron que se presume que los desaparecidos han muerto, pero no habrá un cambio formal en la información hasta que se los recupere, ya que se sabe que los cuerpos están a bordo.
La marina dio a conocer hoy la lista de los 17. Todos menos uno son marinos rasos. Dos son mujeres.
Los oficiales navales que examinaron el casco dañado de la nave llegaron a la conclusión de que la explosión, que abrió un boquete de 9 metros de altura por 12 de ancho a la altura de la línea de flotación, provino de una fuente externa.
"Algunos habían dicho que se produjo una explosión en el interior de la nave; la conclusión es: imposible", dijo Clark. "Es evidente que la explosión vino de afuera".
Clark dijo que no sabía si los especialistas habían llegado a alguna conclusión sobre el explosivo usado en el ataque. "Se necesitará una disección científica" para hacer esa determinación, dijo.
Además de los siete muertos y 10 desaparecidos, hubo 33 heridos en la explosión. El capitán de corbeta Daren Pelkie, vocero de la quinta flota con asiento en Bahrein, dijo que 11 fueron llevados a un hospital militar francés en Djibouti y los 22 restantes serían llevados a Alemania.
