EMOLTV

Clinton insta a Arafat y Barak a "dejar de lado las acusaciones"

En la cita, que se realiza en Egipto, participan el secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, un representante de la Unión Europea e importantes líderes regionales. Se inició mientras la violencia se propagaba por Cisjordania. El presidente egipcio Hosni Mubarak, anfitrión de la cumbre, instó a "rescatar lo que quedaba de credibilidad del proceso de paz".

16 de Octubre de 2000 | 12:08 | AP
SHARM EL-SHEIK, Egipto.- El primer ministro israelí Ehud Barak y el líder palestino Yasser Arafat se sentaron hoy a la mesa de negociaciones con el presidente estadounidense Bill Clinton y otros líderes en una cumbre de emergencia. "Tenemos que dejar de lado las acusaciones", declaró Clinton.

En la cita, que se realiza en un ambiente de tensión, participan el secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, un representante de la Unión Europea e importantes líderes regionales. Se inició mientras la violencia se propagaba por Cisjordania. Un tiroteo comenzaba cerca de Naplusa y los palestinos lanzaban piedras a soldados israelíes en otros dos pueblos.

"No podemos afrontar un fracaso", indicó Clinton. "El futuro del proceso de paz y la estabilidad de la región están en juego".

El presidente egipcio Hosni Mubarak, el anfitrión de la cumbre, instó a "rescatar lo que quedaba de credibilidad del proceso de paz".

Señaló a Israel, destacando que "las agresiones a las que ha estado sometido el pueblo palestino durante las dos últimas semanas me han convencido a propiciar esta reunión".

Clinton, sin embargo, dijo que en una atmósfera "cargada de un cúmulo de resentimiento... tenemos que dejar de lado las acusaciones".

Los líderes tratan de poner fin a los recientes desórdenes de Cisjordania y en Gaza que han causado un centenar de muertes y ha desvanecido la confianza que quedaba entre Israel y los palestinos.

Clinton destacó "cuánto se había avanzado" hace sólo unos meses antes que se estancara el proceso de paz auspiciado por Estados Unidos y que estallara la violencia en la región.

Sobre el punto fundamental, Clinton pidió que se creara una misión investigadora para determinar las causas que produjeron los más graves enfrentamientos entre israelíes y palestinos en años, y para tratar de impedir que vuelvan a producirse.

"Deseamos que las negociaciones vuelvan a comenzar", agregó.

Los líderes estaban sentados a tres metros de distancia entre sí alrededor de una mesa en forma de herradura, presidida por Clinton y Mubarak. Asimismo asistían el rey Abdalá II de Jordania y Javier Solana, el jefe de seguridad de la UE.

Arafat, Barak y Clinton se reunieron separadamente con Mubarak a su turno antes de comenzar la reunión.

Barak le dijo a Mubarak que no retiraría a las fuerzas israelíes ni reabriría las áreas palestinas, hasta que Arafat no vuelva a arrestar a docenas de militantes excarcelados en días recientes y les diga a sus fuerzas de seguridad que dejen de disparar y de participar en desórdenes callejeros, dijo un alto funcionario israelí.

Arafat, aunque aceptó a regañadientes a participar en la cumbre, no mostraba predisposición, por lo menos en público, a deponer sus demandas.

"Vamos en camino a Jerusalén hasta que un niño palestino ice la bandera palestina en los muros de Jerusalén", destacó ayer.

El principal asesor de Arafat, Nabil Aburdeneh, dijo que las partes se encuentran ante una encrucijada. "Ya sea volvemos a la vía de la paz o continuamos con este estancamiento".

El ministro de Relaciones Exteriores israelí, Shlomo Ben-Ami, dijo que será difícil salvar las diferencias entre las dos partes. "Creo que existe una profunda división de malentendidos, hostilidad y frustración", dijo a radio del ejército israelí.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?