MANILA.- La vicepresidenta de Filipinas, Gloria Macapagal-Arroyo, dijo este miércoles que el jefe de Estado, Joseph Estrada, debería dimitir aún si sale victorioso del juicio al que se enfrentará en diciembre ante el Senado por corrupción.
En una rueda de prensa, Macapagal-Arroyo, quien lidera la oposición contra Estrada y constituye una de las voces que pide con mayor ahínco su dimisión, insistió en que, "si al final del proceso, más de un tercio de los senadores le declara inocente, el Presidente permanecerá al mando del Gabinete manchado, ridiculizado y sin la confianza del pueblo".
Estrada se enfrentará a un juicio ante el Senado a partir del 1 de diciembre próximo para responder a varios delitos de corrupción y de violación de la Constitución. La oposición acusa al Presidente filipino de haber recibido, a cambio de favores, millones de dólares procedentes del juego ilegal y en comisiones de una empresa tabacalera.
Para la vicepresidenta, quien poco después de que saliera a la luz el escándalo dimitió de su cargo de ministra de Bienestar y Desarrollo Social, Estrada "no será capaz de gobernar con eficacia, y esta es la razón por la que debe renunciar a su cargo antes de que concluya el proceso".
Estrada ganó las elecciones de 1998 con un amplio margen al obtener ocho millones de votos, la mayoría procedentes de las clases más bajas, quienes aún siguen apoyando al jefe de Estado, pese a las acusaciones de corrupción y la campaña de desprestigio lanzada por la oposición política.
Por su parte, la vicepresidenta, hija del que fuera presidente filipino Diosdado Macapagal, insiste en que el pueblo tiene altas expectativas en que el proceso contra el presidente será íntegro y creíble, y anunció que se celebrarán más protestas durante los próximos días.
Preguntada si respetará el resultado del juicio, Macapagal dijo que ella acatará la decisión del pueblo y advirtió que si se alarga demasiado el proceso la economía entrará en recesión.
Añadió que está dispuesta a asumir la Presidencia cuando Estrada deje vacante el puesto. El presidente filipino viajó hoy a Brunei para unirse a la cumbre de jefes de Gobierno y Estado del Foro de Cooperación Económica de Asia y Pacífico (APEC) en plena crisis política, pero su ministro de la Presidencia, Ronaldo Zamora, dijo hoy que no ocurrirá nada en su ausencia y que todo está controlado en la nación.
