TALLAHASSEE, Florida, Estados Unidos.- La Corte Suprema de la Florida dio hoy su aprobación para la continuación del recuento manual de boletas en la polémica elección presidencial en el estado. Pero, una vez terminado el recuento ¿serán aceptados los votos e incluidos en los totales?
La secretaria de Estado de la Florida Katherine Harris tiene la autoridad para aceptarlos o no. "Esperamos que las acepte", dijo esta noche David Boes, abogado de la oficina de campaña del candidato demócrata Al Gore.
Harris ha dicho que no aceptará ningún voto cuyo recuento haya excedido un plazo que venció el martes.
Unos minutos después de la decisión judicial, funcionarios del condado de Palm Beach anunciaron prestamente que empezarían el recuento manual.
"No hay impedimento legal para que prosiga el recuento", dijo la Corte Suprema de la Florida en una breve orden acordada por unanimidad.
"Obviamente estamos complacidos por la orden" de la Corte Suprema, dijo William Daley, director de la campaña de Gore.
El anuncio de Palm Beach fue formulado por el juez Charles Burton, miembro de la junta de escrutinio del condado. Dijo a una conferencia de prensa que el máximo tribunal estatal no parecía haber dictaminado sobre la cuestión subyacente de si los resultados de los recuentos a mano deben ser incorporados a los totales oficiales.
"Me imagino que eso será la próxima rueda de litigaciones", dijo.
La Suprema Corte estatal tomó la decisión en el caso presentado por dos municipios del sur de la Florida, Palm Beach y Broward, que pedían a la corte que decidiera si se debería continuar con el conteo de votos y cómo hacerlo.
La decisión interina o preliminar de la corte significa que no descarta nuevas impugnaciones legales a los recuentos.
"La orden nos permite iniciar el proceso de recuento. Eso es lo que pretendemos hacer", dijo Burton en West Palm Beach, quien señaló que este laborioso proceso podría llevarse seis días para llevarlo a término.
Las boletas son vigiladas las 24 horas del día y se encuentran resguardadas bajo llave para evitar que se les manipule, indicó Burton.
La cuestión está en danza desde hace varios días, pero asumió una nueva urgencia a causa del dictamen de Harris. Algunos abogados demócratas instaron a los jueces a dictaminar expeditivamente porque los condados no saben si deberían seguir o no el recuento.
Las autoridades electorales de Palm Beach decidieron a principios de semana demorar su recuento manual hasta recibir un dictamen.
"Por cierto esperamos que el recuento se efectúe en Palm Beach tan pronto sea posible, y que ambos condados completen sus votos sin ulteriores demoras de la secretaria de estado", dijo el portavoz de Gore, Doug Hattaway.
El dictamen es una victoria para Gore, pero no asegura que los recuentos en definitiva le permitirán superar a George W. Bush en los comicios estatales. Bush tiene ventaja de 300 votos, mientras falta el escrutinio de unos 2.600 votos de estadounidenses en el exterior.
Gore y Bush seguían también su reñida puja electoral en otros terrenos:
En Tallahassee, Gore solicitó a un juez de la Florida que exija a Harris considerar los disputados votos presidenciales computados después del plazo.
En Atlanta, el cuestionamiento de Bush ante la justicia federal de los recuentos manuales de votos estaba hoy pendiente debido a que un tribunal de apelaciones otorgó a los demócratas plazo hasta mañana para responder.
Bush quiere que el Tribunal de Apelaciones de Atlanta interrumpa los recuentos manuales hasta que se dictamine acerca de si éstos violan los derechos de los votantes a recibir un tratamiento equitativo ante la ley.