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Putin y Castro se reúnen para reanimar antiguas relaciones

La última vez que Castro, de 74 años, recibió a un alto dirigente llegado de Moscú fue en abril de 1989, cuando vino de visita el entonces Presidente Mijaíl Gorbachov.

14 de Diciembre de 2000 | 10:31 | AP
LA HABANA.- Vladimir Putin, el primer Presidente ruso que visita Cuba desde la caída de la Unión Soviética, sostuvo esta madrugada del jueves conversaciones con su anfitrión, el Mandatario cubano Fidel Castro, en la apertura de una visita oficial de dos días que busca de reanimar históricos lazos entre dos ex aliados de la Guerra Fría.

Los dos dirigentes conversaron animadamente, a través de interpretes, poco después de que Castro recibiera a Putin a su llegada al aeropuerto internacional, en una simple ceremonia sin himnos, banderas ni grandes delegaciones.

Al pie de la escalerilla del avión ruso y sobre una alfombra roja, Castro, con su distintivo traje verde oliva, saludó a Putin, y después ambos posaron brevemente para los fotógrafos, estrechándose las manos. Rápidamente, ambos se introdujeron a una limosina rusa -herencia de la presencia soviética en la isla- y arrancaron velozmente al filo de la medianoche.

En la presencia de sus respectivos cancilleres, Putin y Castro hablaron brevemente en la residencia protocolar cubana en la que permanece el dirigente ruso y su esposa Lyudmila, indicaron funcionarios rusos. Aseguraron que Putin invitó a Castro a una visita a Moscú.

La última vez que Castro, de 74 años, recibió a un alto dirigente llegado de Moscú fue en abril de 1989, cuando vino de visita el entonces Presidente Mijaíl Gorbachov. En limosina descubierta, ambos se pasearon en medio de multitudes por las calles de La Habana. No está previsto un recorrido similar en esta visita.

La agenda este jueves incluye la ceremonia oficial de recibimiento, una ronda de conversaciones entre Castro y Putin, así como la firma de acuerdos. Putin además colocará una ofrenda floral ante el monumento 'al soldado soviético' y en la noche se entrevistará con Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional de Cuba y cercano colaborador de Castro, particularmente en asuntos con Estados Unidos.

La Habana fue un aliado estratégico de Rusia durante los años de la Guerra Fría, mientras se estima que 20% del Producto Interno Bruto de la isla provenía de subsidios soviéticos, desde jabón hasta petróleo. Todo eso cambió con el desmembramiento de la Unión Soviética a comienzos de los 90, y desde entonces Cuba ha emprendido modestas reformas económicas para poder campear la crisis desatada por el corte de la ayuda llegada desde Moscú y sus socios del bloque socialista europeo.

De un intercambio estimado en 3.600 millones de dólares en 1991, Moscú y La Habana pasaron a un comercio de unos 600 millones de dólares al año siguiente. Ahora además la política es secundaria, en la medida que el intercambio económico y las posibilidades de negocios han reemplazado a la ayuda soviética desde Moscú, sin un gobierno comunista. Por aquellos años, Cuba acumuló con los soviéticos una deuda estimada por La Habana en unos 11.000 millones de dólares.

Formas de alivio a esa deuda también estarían en la agenda de conversaciones entre ambos dirigentes, así como impulsar un comercio estimado actualmente en unos 1.000 millones de dólares, principalmente en azúcar cubano y crudo ruso.

El viernes en la mañana, Putin, de 48 años de edad y ex agente de la KGB, también presentará honores al prócer independentista cubano José Martí, ante cuyo monumento colocará una ofrenda floral. Después visitará el Instituto de Ingeniería Genética y Biotecnológica.

Tal recorrido pondrá fin a la visita oficial, para al mediodía del viernes comenzar, de forma privada, un fin de semana en el balneario turístico de Varadero. Putin permanecerá allí hasta el domingo al mediodía, cuando parta hacia Canadá.

Ambos países esperan que la visita de Putin reanime las relaciones bilaterales, caídas en su punto más bajo tras el desmoronamiento soviético y la salida rusa de la isla, dejando atrás tres décadas de estrecha colaboración. Rusia, ha dicho Putin, debe moverse rápidamente para revivir sus relaciones económicas con Cuba, o arriesgarse a perderlas ante empresas que ya se preparan para mudarse a la isla. Rusia deberá aprovechar sus buenas relaciones para revivir sus contactos con otras naciones latinoamericanas, señaló Putin a medios cubanos en Moscú, poco antes de partir hacia la isla.

El Presidente ruso señaló enfáticamente que su país no tiene una agenda ideológica para la región en esta oportunidad.