BUENOS AIRES.- El Presidente argentino, Fernando de la Rúa, pese a la amenaza sindical con una huelga nacional y en una demostración de iniciativa política, promulgó este viernes los decretos de urgencia para alinear al país con compromisos diversos que le darán acceso a unos 40.000 millones de dólares en respaldo internacional.
Los decretos incluyen un multimillonario plan de obras públicas, una reforma del régimen previsional y la liberalización del sistema de prestaciones médicas. En el último día hábil del año, De la Rúa quiso demostrar que tiene iniciativa política, al sacar por decretos proyectos que considera claves para su gestión y estaban trabadas en el Congreso por la oposición peronista y por legisladores de la propia Alianza oficialista.
La mayoría de las medidas son resistidas por la Confederación General del Trabajo (CGT), que ayer anunció una nueva huelga general de 36 horas a realizarse el 1 y 2 de marzo en contra del plan económico del gobierno. "Estamos convencidos de que son reformas necesarias e imprescindibles para la economía argentina", manifestó el ministro de Economía José Luis Machinea en rueda de prensa.
El Plan de Infraestructura prevé una inversión de 20.500 millones de dólares en un plazo de cinco años y podría crear cerca de 400.000 puestos de trabajo. Se trata de una medida que el gobierno considera fundamental para reactivar la deprimida economía y bajar la elevada tasa de desempleo del 14,7%.
Asimismo, el gobierno reglamentó por decreto el nuevo sistema de seguridad social que a partir del 1ro. de enero próximo permitirá la libre competencia entre las obras sociales gremiales y las empresas privadas de servicios médicos. Otro de los decretos estableció una reforma del régimen de jubilaciones que dispone la opción para las mujeres de jubilarse a los 60 años, como ahora, o a los 65 años, como los hombres. No elimina, sin embargo, el sistema estatal de jubilaciones, como se había anunciado inicialmente.
El nuevo sistema de jubilaciones incluye además una prestación universal de 100 dólares para las personas que nunca han realizado aportes previsionales. El Presidente vetó asimismo un artículo del presupuesto 2001 impuesto por el Senado que establecía la posibilidad de suspender los recortes salariales de empleados públicos fijados por el gobierno en mayo pasado.
Al negociar con el FMI el "blindaje" financiero que permitirá garantizar el pago de las deudas del país en 2001, el gobierno se comprometió a concretar, entre otras, las medidas que hoy sacó por decreto. Para el Ejecutivo, el "blindaje" ayudará a reactivar la economía, en recesión desde hace más de 3 años, y generará confianza entre los inversores y en los mercados.
