HOUSTON.- Un abogado de la estadounidense Andrea Yates, encausada por ahogar a sus cinco pequeños hijos en la tina del baño, dijo este miércoles que la mujer se declaró inocente por motivo de demencia de las dos acusaciones de asesinato penado con la muerte formuladas en su contra.
Yates, de 37 años, ha sido acusada de ahogar a sus cinco hijos, la menor de seis meses y el mayor de siete años, el 20 de junio, poco antes de llamar a la policía y a su esposo para admitir lo que había hecho.
La semana pasada, los fiscales formularon acusaciones formales por dos cargos de asesinato penado con la muerte y sus abogados notificaron, casi de inmediato, que fundamentarían su defensa en la causal de demencia. Los fiscales aún no han informado si pedirán que Yates sea condenada a pena de muerte.
La mujer, quien vestía el mono color naranja de los presos, no mostró emoción alguna cuando su abogado, George Parnham, hizo en su nombre la declaración de inocencia por demencia.
Su esposo, Russell Yates, un ingeniero de computadoras que trabaja para la Agencia Nacional para la Aeronáutica y el Espacio (NASA), observó desde la primera fila de asientos en el tribunal. Según uno de los cargos, Yates está acusada de matar a sus hijos Noah, de 7 años, y John, de 5, lo que satisfaría el estándar de asesinatos múltiples que sustentaría el cargo de asesinato penado con la muerte.
El otro cargo acusa a Yates de ahogar a su hija de seis meses, Mary, lo que a su vez satisfaría el estándar de asesinato penado con la muerte por matar a un niño menor de seis años.
La magistrada estatal de distrito, Belinda Hill, ordenó la celebración de una audiencia separada para establecer si Yates es competente mentalmente para ser sometida a juicio.
Si esa audiencia establece que sus facultades mentales son deficientes, no procederá entonces el juicio bajo cargos de asesinato penado con la muerte.
Russell Yates ha manifestado públicamente que respalda a su esposa y ha dicho que sus acciones se debieron a una variedad severa de depresión posterior al parto, que comenzó tras el nacimiento de su cuarto hijo y que la atacó de nuevo, con todo vigor, tras el nacimiento de la quinta.
De acuerdo con la ley de Texas, un encausado no es culpable de un crimen por causal de demencia si padecía de un severo defecto mental que le impide discernir entre el bien y el mal al momento de cometer el crimen.
Yates, una ex enfermera y ama de casa, ha estado confinada en el pabellón psiquiátrico de la cárcel del condado de Harris desde la muerte de sus hijos.
