PORTO ALEGRE.- El Foro Social Mundial, que congregó a 60.000 activistas contra la globalización, emitió hoy la llamada Declaración de Porto Alegre, en la que exigió el fin del "militarismo, el neoliberalismo y la cultura de la guerra".
El Foro Social, nacido como una respuesta al Foro Económico que este año cambió su tradicional sede de Davos por Nueva York, acabó hoy con una fuerte crítica al terrorismo y también a la forma como Estados Unidos decidió combatirlo.
El documento, titulado "Por la resistencia al neoliberalismo, el militarismo y la guerra, por la paz y la justicia social", señaló que "los acontecimientos del 11 de septiembre han marcado un cambio dramático en el mundo".
Según el movimiento contra la globalización, "el Gobierno de los Estados Unidos y sus aliados han promovido una operación militar contundente" y, "en nombre de la "guerra contra el terrorismo", han violado los derechos civiles y políticos en todo el mundo".
El Foro Social Mundial afirmó que "la guerra contra Afganistán se está expandiendo a otros frentes" y "no es más que el inicio de una guerra global permanente, que consolida la dominación del Gobierno de Estados Unidos y sus aliados".
El documento atribuyó la recesión de la economía mundial a la "mentira del neoliberalismo y sus falsas promesas de crecimiento y prosperidad".
Agregó que "la deuda exterior de los países del hemisferio sur ha sido pagada varias veces y se sigue cobrando, pese a que ha sido demostrado que es ilegítima, injusta y fraudulenta".
El documento final del foro contra la globalización dedicó un párrafo a la situación de Argentina, en el que aseguró que la "crisis financiera causada por el fracaso de la política de ajuste del Fondo Monetario Internacional (FMI) y una deuda creciente han precipitado un estallido social".
En ese sentido, el Foro Social manifestó su respaldo a la "fuerza de las "caceroladas" con las que el pueblo exige la satisfacción de sus necesidades más básicas".
En sus últimos párrafos, la Declaración de Porto Alegre sintetizó el espíritu del movimiento contra la globalización.
"Somos un movimiento global de solidaridad, unido por nuestra determinación de luchar contra la concentración de la riqueza, la proliferación de la pobreza y las desigualdades, y en contra de la destrucción de nuestro planeta", indicó el documento.
A la segunda edición del Foro Social Mundial, según sus propios organizadores, asistieron 60.000 activistas contra la globalización llegados a Porto Alegre desde 150 países.
