JERUSALEN.- El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, comunicó hoy a funcionarios de la agencia de la ONU de ayuda a los refugiados palestinos, UNWRA, que Estados Unidos hará un aporte especial de 30 millones de dólares para sus operaciones.
El anunció fue hecho esta mañana por Powell en el Consulado de EE.UU., donde se reunió con representantes de esa agencia, que recibe 80 millones de dólares por año de ese país.
Powell, que canceló una visita prevista para hoy con el Presidente palestino Yasser Arafat tras un ataque suicida perpetrado el viernes por una palestina de 20 años en Jerusalén, expresó a los trabajadores de la UNWRA que el Gobierno de EE.UU. está ’’especialmente preocupado’’ por la situación humanitaria en el campo de refugiados de Jenín.
Esta semana, una sangrienta ofensiva militar israelí ’’contra terroristas’’ atrincherados en el lugar causó la muerte a unos 200 civiles y combatientes de la resistencia. Alrededor de 3.000 de sus 15.000 habitantes perdieron su techo en el campo.
Los muertos, que está recogiendo el Ejército israelí, no han sido enterrados, y las autoridades impiden la entrada de las organizaciones humanitarias para evacuar cadáveres y heridos de los sangrientos bombardeos y enfrentamientos.
La prensa israelí informó de que los cadáveres son colocados en camiones-frigorífico estacionados fuera del campo de refugiados y que un equipo militar de expertos en medicina forense y odontología, entre otros, tendrán que identificarlos antes de ser inhumados.
Powell dijo a los representantes de la UNWRA que exigirá al Gobierno israelí que respete la labor de organizaciones internacionales de asistencia social a las víctimas.
