RÍO DE JANEIRO.- Una rebelión de más de doce horas en una cárcel de Manaos (norte de Brasil) dejó un saldo de 13 muertos, indicó este lunes en la mañana el canal de televisión Globo News.
En la prisión de Puraquequara, en Manaos, la capital del estado de Amazonas, cerca de 80 presos se amotinaron el domingo hacia las 17:00 locales (20:00 GMT), para exigir el cambio de dirección de la penitenciaría y la instalación de una cabina telefónica pública en el lugar.
Los amotinados acusaron a los policías de haber ejecutado a algunos presos. La confusión aumentó con el refuerzo de policías y ambulancias, según indicó el canal de información contínua de la red Globo.
La dirección de la penitenciaría no respondió a las exigencias de los presos y la policía tomó la prisión.
En las cárceles brasileñas, en promedio, cada 36 horas hay un amotinamiento, según fuentes de la iglesia católica.
Cifras oficiales señalan que las cárceles brasileñas albergan unos 211.953 detenidos, mientras su capacidad total es de 155.879.
"Hay porquerías más decentes que algunas cárceles en Brasil", declaró a la AFP el ex representante en Brasil de la organización de defensa de derechos humanos Human Rights Watch, James Cavallaro.
Cavallero atribuyó "al trato brutal, a la miseria y a la desocupación de los detenidos" el número de motines en el país.
Desde 1997, 40 prisiones nuevas fueron construidas en el país, 24 de las cuales están solo en el estado de Sao Paulo, pero harían falta al menos 130 para combatir el déficit carcelario.
