BEER YAAKOV, Israel.- Al menos ocho personas murieron y unas treinta resultaron heridas en un atentado suicida perpetrado ante una base militar cerca de Tel Aviv, ataque que el gobierno israelí atribuyó de inmediato al movimiento islamista Hamas.
El atentado fue perpetrado cerca de una estación de autobús a proximidad de la base militar de Tzrifin, al sudeste de Tel Aviv, según fuentes policiales.
El ministro de la Seguridad Interior, Tzahi Hanegbi, precisó que los explosivos utilizados por el kamikaze se encontraban en una bolsa que llevaba consigo.
Se trata del primer atentado en Israel desde la fallida tentativa de eliminación, el pasado sábado en Gaza, de la dirección del movimiento islamista Hamas en la persona de su fundador, el jeque Ahmad Yassin, por parte del ejército israelí.
El jeque Yassin prometió represalias "inolvidables" después de ese ataque efectuado por un avión de combate F-16.
La televisión pública israelí indicó que el Primer Ministro israelí, Ariel Sharon, que se encuentra de visita oficial a India, fue informado del atentado.
"Debemos mostrarnos determinados a actuar contra el terror. Sabemos que India combate también el terrorismo. En nuestra región queremos la paz. Debe haber un cese completo del terror", declaró Sharon durante una cena ofrecida por su homólogo indio, Atal Behari Vajpayee, según un responsable del ministerio indio de Relaciones Exteriores.
"Continuaremos combatiendo a Hamas y a sus líderes porque son los responsables de esta matanza de hoy", afirmó Avi Pazner, portavoz del gobierno israelí.
"Pero consideramos que Arafat y la Autoridad Palestina son también responsables de lo que ha sucedido hoy", añadió, ya que "sabemos que Arafat en persona evitó que su gobierno actuara contra Hamas".
Por su parte un alto responsable de Hamas, Abdelaziz Al Rantissi, afirmó este martes que el atentado era una respuesta a los "crímenes" de Israel, si bien no reivindicó el ataque.
"Sea quien sea el autor, este atentado forma parte de la respuesta a los crímenes sionistas, a los asesinatos, a los intentos de asesinato y a las incursiones", declaró Rantissi.
La dirección palestina condenó el atentado suicida y resaltó que "este mismo día Israel mató a tres palestinos, uno de ellos un niño", señala la dirección palestina en el comunicado, refiriéndose a una operación israelí en Hebrón, en la que murieron dos activistas del Hamas y un muchacho de 13 años.
En Hebrón, el jefe del brazo armado del movimiento radical palestino Hamas, Ahmad Badr, y uno de sus lugartenientes, resultaron muertos en una operación del ejército israelí.
Ahmad Badr y Abed Misk murieron en un tiroteo con efectivos del ejército israelí que dispararon misiles contra un edificio en el que los dos hombres se habían atrincherado junto a otros militantes, según la misma fuente.
El ejército demolió el inmueble de ocho plantas con la ayuda de explosivos después de haber evacuado los cuerpos de los dos activistas.
