LA PAZ.— El Gobierno argentino espera que sus compras de gas a Bolivia se prolonguen por más de seis meses, mientras el Presidente Carlos Mesa aseguró que la decisión de vender a ese país está motivada por un gesto de reciprocidad y solidaridad.
"Estamos optimistas de que esto (contrato de venta) se renovará después de los seis meses", dijo el embajador de Argentina Horacio Antonio Macedo, después de visitar Tarija, la región del sur que posee el 85% de las reservas hidrocarburíferas.
"Somos respetuosos de las decisiones de Bolivia y nosotros no queremos ser intermediarios ni de gas ni de precios", dijo ante las exigencias del Gobierno boliviano para que el energético no sea desviado a Chile.
El Presidente Carlos Mesa anunció que las exportaciones a Argentina, probablemente a partir de mayo, en una cantidad de hasta 4 millones de pies cúbicos por día, se harán por seis meses y que la continuidad del contrato estará sujeta a los resultados del referéndum previsto para julio el cual decidirá el futuro del energético.
"Argentina tuvo un gesto positivo en el pasado. Prolongó sus compras de gas a Bolivia por una decisión política en un momento de transición en el país a pesar de que en ese tiempo no necesitaban más gas", dijo el Presidente.
Los Mandatarios de Bolivia y Argentina darán su visto bueno a las operaciones en el encuentro postergado para el 21 de abril en la localidad fronteriza de La Quiaca.
La Central Obrera Boliviana (COB) y el partido del líder y diputado cocalero, Evo Morales se oponen a la venta del energético y exigen que previamente se reforme la Ley de Hidrocarburos y se eleve las regalías que pagan las petroleras del 18% al 50%.
Los sindicatos anuncian una huelga a partir del 2 de mayo. Pero regiones como Tarija y sectores empresariales se han declarado a favor de la exportación del energético.
El nuevo ministro de Minas e Hidrocarburos, Xavier Nogales, dijo el viernes que "el Gobierno espera ganar" y lograr apoyo a sus planes de exportación del energético a otros países en el referéndum de julio.
"El gobierno espera ganar porque creemos que el pueblo va a preferir utilizar los recursos en su propio beneficio que dejarlo bajo tierra y perjudicarnos a todos", apunto.