BOGOTÁ.- Tropas militares colombianas evitaron el secuestro de 20 personas en una zona del departamento de Norte de Santander, en la frontera con Venezuela, informaron hoy fuentes castrenses, al confirmar la muerte de cinco irregulares en combates.
Los efectivos lograron rescatar a los viajeros, quienes habían sido interceptados por rebeldes de las FARC en una vía que une a las poblaciones de Tibú y La Gabarra, próximas a la frontera noreste con Venezuela.
"Las tropas reaccionaron prontamente, rescataron las 20 personas, entre ellas un menor de edad y unos ingenieros trabajadores de Ecopetrol (empresa estatal de petróleos)", dijo el comandante de quinta división del Ejército, general Germán Galvis.
Indicó que la acción de sus hombres impidió que los rebeldes incineraran nueve vehículos en los que habían instalado cilindros de gas cargadas con explosivos.
En el sitio, un campesino resultó herido al pisar un campo minado y fue llevado por las tropas hasta un hospital en la ciudad de Cúcuta, la capital de Norte de Santander.
Ante la presencia de los uniformados, los rebeldes del frente 33 de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) emprendieron su huida con dirección hacia Venezuela, se informó.
Por otra parte, la agencia de noticias del Ejército indicó que en operaciones desplegadas en los departamentos de Cesar (norte), Antioquía (noroeste), Bolívar (norte) y Cauca (suroeste) murieron en combates cuatro rebeldes y un paramiltar.
En los operativos, los soldados se incautaron de armas, municiones, y material para la fabricación de artefactos explosivos.
Los militares también lograron destruir cinco laboratorios para el procesamiento de estupefacientes en un área rural del municipio de Tumaco, departamento de Nariño (suroeste).
En el sitio fueron hallados 1.455 kilos de insumos sólidos, 125 kilos de coca procesada y 2.750 kilos de coca picada, precisó el informe castrense.
Colombia padece el conflicto armado más antiguo de la región, que involucra a tropas del Ejército, rebeldes de izquierda y paramilitares de extrema derecha.
El secuestro es considerado como una de las expresiones más dramáticas de la violencia en el país andino, con una media anual de 3.000 casos en el último lustro.
