LIMA.- Más de 200 policías ingresaron hoy a Ilave, en Puno, con el fin de restablecer el orden de la ciudad en la que ayer fue asesinado el alcalde por una turba de manifestantes.
El ministro del Interior, Fernando Rospigliosi, informó que se han identificado a algunos individuos que serían los incitadores a los hechos de violencia producidos en la víspera.
Según publica el Comercio de Lima, la autoridad negó rotundamente haber autorizado a la policía para que repeliera los ataques de la población con sus armas de reglamento.
Rospigliosi agregó que, aunque sabían de la situación que se vivía en esa localidad, decidieron no enviar más policías para evitar enfrentamientos que habrían originado decenas de muertos civiles.
Asimismo, confirmó el ingreso de los refuerzos policiales con la finalidad e recuperar el control de la ciudad. "En la mañana de hoy se ha desbloqueado el puente que va hacia Bolivia. Estamos tratando de restablecer las actividades lo más pronto posible, evitando toda forma de violencia", afirmó.
Sin embargo, confesó que aún no se tiene conocimiento de la situación de dos de los regidores que fueron secuestrados ayer por los comuneros.
El ministro explicó que el contingente policial es de Puno, Arequipa y Lima, aunque quienes ingresaron primero a Ilave son efectivos de la misma zona para evitar enfrentamientos innecesarios.
Indicó que, por versiones de testigos, grabaciones fílmicas y fotografías, se ha identificado a quienes incitaron los hechos violentos y que todo ese material será puesto a disposición de la fiscalía para la correspondiente investigación del caso.
