WASHINGTON.— El presidente George W. Bush dijo el martes que Estados Unidos entregará al depuesto dictador iraquí Saddam Hussein al nuevo gobierno interino cuando exista la "seguridad apropiada para ello".
En declaraciones junto al presidente afgano Hamid Karzai, Bush se negó a indicar un plazo para la entrega de Saddam y añadió que ni Washington ni el nuevo gobierno iraquí quieren existan "fallas de seguridad y que Saddam Hussein no vaya a juicio".
Bush dijo que compete al nuevo gobierno determinar qué se hará con el clérigo integrista Muqtada al-Sadr.
"El gobierno interino iraquí tratará el caso de al-Sadr como le parezca conveniente", dijo Bush.
El ex dictador iraquí está detenido en un lugar no divulgado desde que las fuerzas de Estados Unidos lo encontraron en diciembre pasado.
Su estatus ha estado en discusión a medida que se acerca la fecha del 30 de junio, prevista para la entrega de la soberanía a las autoridades iraquíes.
Bush reiteró que Estados Unidos "hizo absolutamente lo correcto" al sacar del poder a Saddam Hussein, a quien llamó una "fuerza desestabilizadora".
El martes más temprano el primer ministro interino de Irak, Iyad Alaui, dijo que Saddam y otros detenidos serán transferidos a las autoridades iraquíes en las próximas dos semanas.
Alaui indicó que Saddam enfrentará un juicio "tan pronto como sea posible", pero no aclaró la fecha.
Bush se negó a decir cuándo transferirá a Saddam.
"Quiero estar seguro de que cuando se transfiera la soberanía, Saddam Hussein esté en la cárcel", sostuvo Bush.
"Nosotros estamos allá por una razón", agregó, haciendo notar que los militares estadounidenses continuarán custodiando la seguridad de Irak.
Bush dijo que "el momento apropiado para la transferencia de Saddam Hussein" era uno de los numerosos temas importantes en los que Estados Unidos trabaja con el nuevo gobierno interino de Irak.
