LIMA.— La aerolínea más grande del Perú, Aero Continente, transferida hace dos días por la familia Zevallos a sus trabajadores, reanudó el viernes sus vuelos domésticos con otro nombre: Nuevo Continente.
Aero Continente suspendió sus vuelos nacionales el 12 de julio por carecer de una póliza integral de seguro para sus tripulantes y pasajeros en vuelo, e instalaciones o personas en tierra, en caso de un eventual accidente.
Hace dos días sus trabajadores anunciaron que la entonces presidenta de la empresa, Lupe Zevallos, les transfirió la propiedad de la misma ante su imposibilidad de conseguir un seguro integral en el extranjero.
El fundador de la aerolínea, Fernando Zevallos, fue incluido el 1 de junio en una lista de capos internacionales del narcotráfico por el gobierno de Estados Unidos.
Fernando y Lupe Zevallos también son requeridos por el gobierno de Chile para su encauzamiento por un presunto caso de lavado de dinero procedente del tráfico de drogas. El gobierno peruano aún no ha dicho si accederá al pedido chileno.
Fernando Zevallos además está impedido de ingresar a Estados Unidos y de salir del Perú porque afronta un juicio por narcotráfico en el que también están involucrados unos doce integrantes de una banda denominada "Los Norteños", capturada cuando en 1995 trataba de despachar clandestinamente 3,3 toneladas de cocaína a Estados Unidos.
Después de varias tentativas para obtener un seguro nuevo, Aero Continente anunció el miércoles que siete inversionistas, sus trabajadores, habían comprado la aerolínea por más de 12 millones de soles, unos 3,5 millones de dólares, y cambiado el nombre de la compañía a Nuevo Continente.
Como resultado de la transferencia, las autoridades peruanas de aviación dijeron en una declaración que "la compañía renovó satisfactoriamente todo su seguro aeronáutico, cubriendo ocho aviones".
Agentes de Viaje y empleados de la aerolínea en el aeropuerto de Lima confirmaron que los aviones de Nuevo Continente empezaron a volar el viernes en la mañana y que una docena de vuelos domésticos estaban planificados para el día.
El embajador estadounidense en Lima, James Curtis Struble, dijo a los periodistas que autoridades de los Estados Unidos revisaban si la transferencia de la aerolínea significa "la separación total de la compañía de personas implicadas en el tráfico de drogas".