BUENOS AIRES.— Fue la protagonista de un programa de televisión que se proponía mostrar una dolorosa realidad: la prostitución de menores. Su historia conmovió a todos los espectadores argentinos, pero su desenlace resultó increíble.
Días después de mostrarse ante las cámaras, Carina Marisa Cirica confesó que no es menor ni prostituta: tiene 27 años y fingió ser prostituta sólo para conocer al apuesto periodista y actor Gaston Pauls, de quien dijo estar profundamente enamorada.
"Quiero decirle a todo el mundo que no trabajo en la calle, que no tengo hijos y que no tengo la edad que se dijo... No quiero hacerle daño a nadie, pero quiero que se sepa la verdad", dijo Cirica en una entrevista con una radioemisora de la provincia cordillerana de Mendoza, de la que es oriunda.
Consultada por la razón del engaño, no dudó en afirmar: "Para conocer personalmente a Gastón Pauls".
Fue una dura confesión para Pauls, que con su programa "Ser urbano" busca revelar la más cruda realidad, la que en este caso resultó ser una farsa.