WASHINGTON.- Un misterioso río de lava enterró lo que expertos en Marte habían esperado fuese una buena evidencia de un planeta cubierto de lagos y ríos, dijeron este jueves científicos.
Y para empeorar la cosa, el área ha pasado millones de años bajo bombardeos de meteoritos y llena de agujeros de rocas despedidas de impactos cercanos.
Los primeros 90 días de las exploraciones del robot Spirit están documentados en una serie de reportes de la revista Science, que sale a la venta el viernes, que muestran desconcertantes ríos de lava y evidencias de edades del hielo que vagamente se parecen a las una vez vistas en la Tierra.
Spirit y su gemelo en el otro lado del planeta, Opportunity, se han trasladado a formaciones más interesantes, pero los científicos han aprendido a que pueden confiar en muchos de sus instintos acerca de lo que han visto en Marte.
El Spirit aterrizó en el cráter Gusev, de 150 kilómetros de diámetro, el 3 de enero, y se trasladó a través de hoyos y alrededor de rocas recolectando polvo, perforando rocas y tomando medidas con espectómetros.
’’El cráter Gusev es un lugar que creemos seguramente debió haber tenido agua líquida en él en algún momento’’, dijo el investigador científico principal, Steven Squyres.
’’Cuando ves un hoyo en el suelo con un gran cauce de río fluyendo dentro de él, no le toma mucho a los científicos espaciales el determinar que hubo agua allí en algún momento’’.
Para su gran decepción, el Spirit ha encontrado poca evidencia de esa agua, y en cambio ha hallado una delgada capa de basalto y otras rocas volcánicas en gran parte del cráter, enterrando las evidencias más jugosas.
’’Aterrizamos con la esperanza de que podríamos identificar sedimentos en asentamientos de agua. En cambio las rocas que hallamos son todas capas de basalto’’, dijo Squyres.
’’Hay pequeños cráteres por todo el lugar. La lava ha cubierto esta región del cráter Gusev y luego han sido todos machacados por los impactos’’.
