RAMALÁ.— En un acto poco característico, el dirigente palestino Yasser Arafat reconoció el miércoles que su gobierno ha cometido errores y prometió corregirlos.
Arafat dijo lo anterior en un discurso ante legisladores palestinos en sus asolados cuarteles del poblado cisjordano de Ramalá.
Arafat se ha visto bajo una creciente presión internacional y local para implementar reformas a la autoridad palestina.
’’Debemos de ser lo suficientemente valientes como para admitir nuestros errores. Ratificamos nuestro compromiso de corregirlos’’, indicó.
Arafat no dio detalles sobre esos errores, pero su gobierno se ha visto fuertemente debilitado por cuatro años de combates con Israel y los palestinos lo suelen acusar de corrupción e ineficiencia.
A pesar de las crecientes críticas, Arafat se ha negado a dejar ciertas atribuciones, en particular el control de los múltiples, y muchas veces enfrentados, servicios de seguridad palestinos.
El nombramiento el mes pasado de un familiar de Arafat para un puesto de seguridad de alto nivel en la Franja de Gaza causó protestas violentas y fue seguido por una ola de secuestros.
Israel ha prometido retirarse de Gaza el próximo año. Egipto, que actúa como mediador, ha ofrecido encargarse de la seguridad en la zona tras la salida israelí, pero exige que Arafat reforme sus fuerzas de seguridad.