BRASILIA.- El proceso de licitación para la compra de 12 cazas supersónicos para la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) podrá ser aplazado por tres o cuatro años más, reveló el vicepresidente de la República, José Alencar.
Según Alencar, Brasil "no tiene prisa" en adquirir las nuevas aeronaves, y considera que podría ser ventajoso aguardar los nuevos progresos de la tecnología en este sector, en lugar de comprar ya aviones que podrán estar obsoletos en breve.
"En este sector, la tecnología se desarrolla en forma muy rápida. Si compramos los cazas ahora, tendremos que esperar un tiempo más, hasta que sean entregados. Y, en ese caso, corremos el riesgo de recibir aviones ya superados", expresó el ministro, en declaraciones que reproduce hoy el diario brasileño O Globo.
Alencar advirtió, sin embargo, que la decisión final sobre aplazar o no la compra de los aviones es del presidente Luiz Inacio Lula da Silva.
La licitación para la compra de los nuevos cazas de la FAB -un negocio de por lo menos US$ 700 millones- fue uno de los temas tratados durante la visita que cumplió este lunes a Brasilia el presidente de Rusia, Vladimir Putin.
Según la prensa local, los aviones rusos Sukhoi SU-35, del consorcio Rosoboronexoport, tienen grandes posibilidades de ganar la disputa, en la que intervienen además el grupo estadounidense Lockheed Martin, con el F-16, el consorcio francobrasileño Dassault-Embraer, con el Mirage 2000 Gripen.
La licitación para la compra de nuevos cazas supersónicos para la FAB fue abierta durante el pasado gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002), pero el proceso fue suspendido a comienzos de 2003 por Lula da Silva, que optó por utilizar los recursos presupuestarios para impulsar su programa de combate al hambre.
El proceso se reanudó a mediados del año pasado, y algunos analistas esperaban que su resultado fuese anunciado esta semana, durante la visita de Putin a Brasil, lo que no se confirmó.
