La madre de Tamburrino dijo que él está muy mal de ánimo.
CUSCO.- Más compleja de lo que se pensó inicialmente se ha tornado la situación procesal de los jóvenes chilenos detenidos en el Cusco, pues ambos se encontraban en el vecino país en calidad de ilegales.
Según informó el abogado de la defensa, Juan Carlos Quispe, existen pocas posibilidades de que obtengan la libertad por haber atentado contra el patrimonio cultural del Cusco, aunque instó a los familiares a no perder las esperanzas.
"Estamos formulando un recurso de apelación solicitando que el tribunal cusqueño les pueda otorgar libertad", explicó.
Quispe dijo que espera que el juez Walter Chipana tome en cuenta que Enzo Tamburrino, de 19 años, y Eduardo Cadima, de 20, estaban bajo influencia del alcohol al momento de rayar la pared de "La casa de la serpiente", construcción inca protegida como patrimonio de la humanidad.
En tanto, la madre de Tamburino, María de la Luz Saldías, señaló que "la prensa cusqueña pide la pena máxima o la deportación, pero no sé lo que va a hacer el juez. Yo quiero pedir a la Cancillería que genere la deportación, porque ellos no tendrían la edad legal para ser juzgados".
A juicio de la mujer, los jóvenes están muy mal anímicamente. "Yo conversé anoche con mi hijo y le dije que cómo no pensó lo que hacía estando en el extranjero y siendo el Cusco una ciudad cultural".
El abogado indicó que la única salida para los chilenos en este momento es que el juez tome en cuenta el estado de ebriedad al rayar la edificación inca. Si así fuese, la condena podría disminuir de seis a sólo tres años de cárcel.
