RÍO DE JANEIRO.- La constructora brasileña Norberto Odebrecht emitió la noche del miércoles un comunicado sobre el "probable secuestro" de uno de sus funcionarios, posiblemente de nacionalidad brasileña, tras un ataque contra un convoy en el norte de Irak.
La gigante de construcción pesada e infraestructura afirmó que "está haciendo todos los esfuerzos necesarios para el rápido y favorable término del probable secuestro de uno de sus integrantes, ocurrido en la mañana del día 19 de enero, en las proximidades de la ciudad de Baiji, en Irak".
En esa área del norte iraquí la empresa "participa de una obra de reforma de una usina termoeléctrica", agregó la constructora sin precisar la nacionalidad de su trabajador desaparecido, que según la prensa local, sería brasileña.
La divulgación de nuevas informaciones "será hecha por medio de comunicados oficiales y estará condicionada al objetivo principal, de atender las medidas de seguridad necesarias para la mejor conducción del asunto", finaliza el texto de la compañía.
Tres civiles, entre ellos una mujer, murieron este miércoles al estallar una bomba artesanal al paso de su vehículo en la región de Al Hajaj, al norte de Baiji, declaró el teniente coronel de policía Naser Saad.
Ese vehículo pertenecería a la empresa brasileña y el funcionario habría sido secuestrado tras el ataque, según los medios de prensa locales.
El grupo brasileño Odebrecht actúa, como administrador de sus propios negocios, en las áreas de ingeniería y construcción así como química y petroquímica.
En asociación con otros grupos empresariales, Odebrecht participa del capital de empresas en las áreas de infraestructura y servicios públicos, según su página Internet.
