 Atila, el rey bárbaro de los hunos, del cual las actuales generaciones pretenden desligarse. |
BUDAPEST.- Los hunos, autoproclamados descendientes de Atila, conocido en el siglo cinco como "el azote de Dios", podrían conseguir el reconocimiento legal como minoría étnica en Hungría, después de haber recogido suficientes firmas en una petición.
Para conseguir tal reconocimiento en el país del este de Europa, los grupos deben probar que han vivido en Hungría durante más de 100 años y recoger 1.000 firmas válidas.
El comité de derechos humanos del parlamento discutirá el asunto mañana, después de que el Comité Electoral Nacional dijera en su página web que el número de firmas válidas había excedido de 1.000. El comité hará una recomendación al parlamento, que finalmente decidirá sobre el asunto.
Algunos han sugerido que los partidarios de la petición están movidos por las donaciones económicas que se les otorgan a las minorías.
Los hunos modernos de Hungría dijeron que estaban despojándose rápidamente de su antigua imagen de saqueadores adquirida cuando arrasaron partes de Europa.
"Los hunos de hoy son pacíficos y apacibles, no tenemos nada que ver con matanzas o arcos y flechas", dijo Gyorgy Kisfaludy, quien se describió como el alto sacerdote de los hunos.
Kisfaludy dijo que había más de 100.000 hunos en Hungría y sus alrededores.
El nombre de Hungría fue puesto al país por los extranjeros, quienes relacionaron a las tribus de la estepa que llegaron con Arpad, el fundador de la nación en el año 896, con los hunos de cuatro siglos atrás, aunque no existe ninguna conexión entre los dos.
Los magiares adquirieron fama de sangrientos por derecho propio después de asaltar el oeste de Europa en el siglo X, cuando los monjes rezaban: "De las flechas de los hunos defiéndenos nuestro Señor".
Hungría tiene un parque temático dedicado a los hunos, cuyo propietario asegura que está situado en el lugar donde fue enterrado Atila.
Atila es aún un nombre masculino habitual en Hungría.