LA PAZ.- El pleno del Senado de Bolivia aprobó hoy el polémico proyecto de Ley de Hidrocraburos que regirá el negocio energético en el país, el cual estipula un mayor régimen tributario para las petroleras y obliga a la migración de los contratos vigentes.
Los senadores concluyeron a primera hora de este viernes la discusión de los 142 artículos de esta norma, que volverá a reunir a los diputados para unificar las posibles diferencias entre ambas cámaras, y luego pasará a manos del Ejecutivo para su promulgación.
"Quiero felicitar a todos los senadores por este importante trabajo", declaró el presidente del Senado, Hormando Vaca Díez, al finalizar el debate parlamentario.
El legislador Hugo Carvajal, del Movimiento de la Izquierda Revolucionaria (MIR), consideró que el Senado cumplió un trabajo "bastante responsable", y estimó que no se realizaron "muchos cambios" con respecto a la propuesta enviada por los diputados.
"Fue un traajo bastante intenso (...) Creo que el Parlamento, el Senado, ha cumplido con el país", añadió.
El documento prevé un impuesto del 32 por ciento para las empresas y mantiene en 18 por ciento las regalías de este sector, a la vez que establece la consulta 'obligatoria' de los pueblos indígenas para ejecutar los proyectos petroleros.
Ratifica, además, un cuestionado artículo que prevé la adecuación obligatoria de los contratos petroleros a la nueva ley, en lo que distintos analistas consideran como un claro distanciamiento del Parlamento de los pedidos de la administración de Mesa.
El Impuesto Directo a los Hidrocraburos (IDH), de 32 por ciento no acreditable por las empresas, se perfila como uno de los puntos más polémicos de esa legislación, a partir de la cual se sentarán las nuevas bases del negocio gasífero boliviano.
La Constitución establece que Mesa puede vetar la Ley de Hidrocarburos, con lo que dejaría en manos del Congreso su promulgación, o formular observaciones a algunos artículos.
Vaca Díez indicó que si la proposición del Mandatario consigue la votación de un tercio del Legislativo, podrá incluir sus cambios.
A su vez, el presidente de la Cámara de diputados, Mario Cossío, aseguró que si el Jefe de Estado se niega a promulgar la norma, el Congreso se encargará de darle luz verde.
Medios periodísticos recordaron, entretanto, que Mesa anticipó recientemente que no aprobará una ley que "inviabilice las inversiones en el país".
El Congreso de Bolivia discute desde mediados de año pasado la denominada 'ley del gas', de cuya aprobación dependen importantes negocios gasíferos con Argentina, Brasil, China y Perú, entre otros.