WASHINGTON.- El hombre sospechoso de asesinato que se había subido a una enorme grúa para evitar que la policía del estado norteamericano de Atlanta lo capturara, depuso hoy su actitud después de estar encaramado a cien metros de altura durante más de 50 horas y fue arrestado.
Un oficial de policía se acercó a Carl Edward Roland, sospechoso de asesinar a su novia Jennifer Gonzalez por una supuesta infidelidad, y le ofreció agua, oportunidad que aprovechó para darle un choque eléctrico con un arma Taser.
Roland había amenazado con suicidarse tirándose al vacío.
Hasta la mañana de hoy, el hombre había rechazado la comida y el agua que la policía le había ofrecido. Además, las autoridades intentaron en vano que Roland abandonara la grúa con helicópteros volando a su alrededor y sonando sirenas.
"Aparentemente tenía sed", dijo hoy a la cadena CNN el sargento John Quigley, portavoz de la policía.
Un oficial del departamento de bomberos en el lugar dijo que Roland sufrió deshidratación y exposición a las condiciones meteorológicas, pero aparentemente no tenía signos de traumas.
La policía había despejado el área alrededor de la grúa, lo que causó enojo entre los residentes y comerciantes de la zona. El incidente causó grandes atascos, agravados por la concurrencia de curiosos que querían ver el desarrollo de la odisea. La grúa está ubicada en el barrio de Buckhead, una zona con muchos restaurantes.
Roland, de 41 años, es acusado de estrangular a su novia y esconder el cadáver en un estanque ubicado detrás del complejo de apartamentos donde ella vivía.
El cuerpo fue hallado el martes. Dos días antes, Roland había dicho a conocidos creer que Gonzalez lo estaba engañando y pidió que le consiguieran un arma de fuego para matarla, de acuerdo con la orden judicial.
