MADRID.- El tercer encierro de las fiestas de San Fermín terminó el sábado con cuatro heridos por asta de toro, ninguno de los cuales corre peligro de muerte, informaron fuentes de la Cruz Roja.
El herido más grave es un varón de 24 años que no quiso revelar su nombre ni su origen, y que recibió dos cornadas de 10 cm. cada una, una en un muslo y la otra en la región perianal.
Un francés de 50 años, André Lailheugue recibió una cornada en la cara, y su pronóstico es menos grave.
Juan Carlos Labalde, de 46 años y de Zizur, recibió una herida puntiforme en una pierna, mientras que el burgalés Jesús Marroquín, de 31 años, fue corneado en un glúteo.
Los dos heridos que no fueron corneados son Jesús Arbizu, pamplonica de 26 años, con contusiones, y Javier Velasco, logroñés de 38 años, con luxación clavicular.
Los seis toros de Dolores Aguirre dejaron un número bastante bajo de heridos en este encierro, teniendo en cuenta la gran cantidad de corredores que han tomado parte y la humedad del pavimento que han totalizado el recorrido en dos minutos y 59 segundos.
Este encierro fue uno de los más masificados de los que se tiene noticia, según informó la Cruz Roja.
Tres de los cuatro corredores que fueron corneados recibieron las heridas en el tramo de Mercaderes. Los toros estuvieron más lentos de lo habitual, no cayeron en la curva y enfilaron juntos hacia Estafeta.
A partir de allí, la Cruz Roja destacó que el encierro tuvo momentos de peligro por la gran multitud reunida.
Los populares y famosos encierros de San Fermín causaron la muerte a 15 personas desde 1910, la última hace dos años.
Desde que el escritor estadounidense Ernest Hemingway diera a conocer en todo el mundo los sanfermines con la novela "Fiesta" en 1920, éstos se han hecho especialmente populares entre estadounidenses, británicos y australianos.
