GROZNY.- El partido Rusia Unida, fiel al Kremlin, lidera las elecciones parlamentarias llevadas a cabo hoy en la conflictiva república separatista rusa de Chechenia, según los primeros resultados provisionales.
Tras el conteo de ocho de los 430 locales electorales, Rusia Unida obtenía el 60,99 por ciento de los votos, señaló el director electoral Ismail Baichanov en la noche de hoy. El segundo lugar lo ocupaba el Partido Comunista con 12,96 por ciento. Les seguía la liberal Unión de Fuerzas de Derecha (SPS) con 11,56 por ciento, en cuyas listas figura el ex combatiente rebelde Magomed Jambiyev.
El "hombre fuerte" de Chechenia, el vicejefe de gobierno Ramsan Kadyrov, ubicó a sus seguidores en las listas de todos los partidos, por lo que se espera que tenga una fuerte representación en el Parlamento.
Casi el 60 por ciento de los chechenos acudieron hoy a las urnas para elegir un nuevo Parlamento, bajo la vigilancia de cerca de 24.000 soldados y policías movilizados por Moscú para prevenir posibles atentados rebeldes. Para que la elección sea considerada válida, más del 25 por ciento de los chechenos con derecho a voto debía acudir a las urnas.
Un total de 345 candidatos, entre ellos cuatro ex combatientes, se disputaron 58 asientos en el Parlamento bicameral. Sin embargo, debido a la continua violencia en la república del norte del Cáucaso, existen dudas acerca de la imparcialidad de los comicios, especialmente entre organizaciones defensoras de los derechos humanos rusas y extranjeras.
En comicios anteriores, el Kremlin supuestamente manipuló masivamente los resultados en beneficio de la dirigencia chechena leal a Moscú.
"La elección es válida y transcurrió tranquilamente, no hubo violaciones serias a la ley", dijo el director de la comisión electoral chechena Ismail Baichanov en Grozny tras el cierre de los locales.
Representantes del Consejo de Europa desplazados a la región confirmaron la relativa calma. "Las elecciones se están realizando, desde el punto de vista técnico, bien, pero no está claro si son realmente libres", había dicho el diputado alemán Rudolf Bindig.
Entre los 600.000 habilitados para votar se incluían 34.000 soldados rusos que se encuentran estacionados de manera permanente en Chechenia.
Para el Kremlin, las elecciones parlamentarias de Chechenia significan la restauración definitiva de la autoadministración política tras el fin oficial de la guerra contra los separatistas islamistas.
"A partir de elecciones anteriores en Chechenia sé que se trata de una farsa, por lo que una observación no hubiera tenido sentido", dijo la presidenta del moscovita Grupo Helsinki, Lyudmila Alakseyewa.
Además, el verdadero poder en el Cáucaso norte no depende de las instituciones, según el parlamentario suizo Andreas Gross, uno de los informadores sobre Chechenia para el Consejo de Europa. Gross hizo referencia al controvertido Ramsan Kadyrov, destituido por Putin. Este tiene un cuerpo de guardias de unos 5.000 hombres acusados de numerosos asesinatos y secuestros en la región.
El jefe nominal de Kadyrov, el presidente Alu Aljanov, describió a los comicios como un paso positivo. Según aseguró en la tarde de hoy, esta elección es sólo el comienzo de un proceso democrático en la conflictiva región, donde los enfrentamientos entre el gobierno ruso y los rebeldes separatistas han dejado decenas de miles de muertos en la última década.
"No van a ser unas elecciones en el sentido ideal europeo", admitió previamente Aljankov. "Pero serán lo más sinceras y democráticas posibles", aseguró.
Por su parte, Kadyrov declaró hoy desde su pueblo natal de Tsentoroi: "Nuestra labor no concluye con estas elecciones. Nuestra tarea finaliza cuando no haya más muertes ni asesinatos".